DEPORTES
Acevedo y su huella en el futsal
La zona 21 es un semillero de futbolistas, de esos como Érick Acevedo, quien a pesar de que tuvo sus inicios en el futbol once, terminó por enrolarse al futsal, disciplina en la que se hizo de grandes conquistas para consagrarse como el máximo referente de esta modalidad.
El Canche, como le dicen sus conocidos, disputó 3 mundiales, y es el máximo goleador de la bicolor en esa clase de justas: se llenó la boca de gol 5 veces, 3 de esas en Brasil 2008, a criterio de él una de las participaciones que más recuerda porque se asistió como campeón del clasificatorio.
“Fue ampliamente especial, salimos campeones de la Concacaf en nuestra casa y eso nos puso en la cúspide del área y en la retina del mundo”, expresa el exjugador, quien portó el número 10 en su espalda, con el que se dedicó a hacer historia, producto de una zurda muy educada.
Su punto de partida en la disciplina fue en 2000, cuando fue llamado para integrar la Selección que disputó el Mundial de Futsal en nuestro país. “Era la primera vez que Guatemala jugó una Copa del Mundo en alguna disciplina del futbol, y eso lo hizo muy emotivo”, recuerda.
El gol sobre la hora, con el que se le ganó 6-5 a Kazajistán, en 2000, y el único tanto, también de él, con el que se venció a Egipto, en el debut de la azul y blanco en el Mundial de Brasil, son de los goles más especiales para Acevedo.
Pero no solo en la Selección hizo historia, Glucosoral tuvo la dicha de tenerle en sus filas. Con el equipo del suero oral, el Canche se proclamó tetracampeón y fue goleador del Torneo de Futsal en 2004, con 25 anotaciones, cuando militaba con Guerreros.
“Glucosoral es dinastía, es el mejor equipo de la historia del futsal en Guatemala, y cuando puedo lo voy a ver jugar”, manifiesta y agrega que la disciplina como tal es su amor pequeño porque “el futbol en general es mi pasión”.
Desde 2013, cuando una lesión en las rodillas lo hizo retirarse, comenzó la leyenda del histórico, fue formador de talentos, entre los cuales sobresale Jonathan Arévalo, jugador mundialista en Colombia 2016, técnico de equipos de futsal y ahora dirigente deportivo en la Fedefut, en la que tiene a su cargo la parte del desarrollo del futbol en general. B. Anton
Atenas, EFE
La llama olímpica abandonó este sábado Grecia a bordo del histórico velero de tres mástiles Belem, que zarpó del puerto ateniense El Pireo rumbo a Marsella, en Francia, país anfitrión de los Juegos Olímpicos de 2024.
A menos de 100 días de la fecha prevista para la inauguración de la competición en París, el velero francés inició un viaje histórico, pues es la primera vez que la flama de las justas, que cada cuatro años se enciende en la antigua Olimpia, es trasladada por vía marítima desde Grecia a la nación anfitriona de los JJ. OO.
Hasta salir del puerto de El Pireo, la nave francesa fue acompañada por otros 25 veleros y por el trirreme (tipo de nave antigua inventada en el siglo VII a. C.) Olimpiás, de la armada helénica.
El presidente del Comité Organizador de París 2024, Toni Estanguet, fue quien entregó el fuego sagrado a la delegación francesa encargada de portarla en la emblemática goleta.
Los primeros Juegos Olímpicos contemporáneos tuvieron lugar en Atenas en 1896, el mismo año en el que, por otra parte, el Belem, con velas cuadradas y casco de acero, realizó su primera travesía marítima, cuando partió de Nantes (Francia) rumbo a Belem (Brasil). Casi un siglo después, en 1984, la embarcación francesa, el último velero de tres mástiles de la marina mercante de Francia, fue designada monumento histórico.
Londres, EFE.
El Barsa femenino se clasificó para a su quinta final de Liga de Campeones, la cuarta consecutiva, luego de superar al Chelsea por 0–2, en un choque trepidante que se decidió con los goles de Aitana Bonmatí y Fridolina Rölfo, que remontaron el adverso 0-1 de la ida de semifinales.
Las azulgranas consiguieron su pase a la final, que tendrá lugar en San Mamés (Bilbao) el próximo 25 de mayo, después de que un gol de Bonmatí (min 25) igualó la eliminatoria y que Rolfö, de penal, culminó la remontada a 16 minutos del final.
Madrid, EFE.
Con el empate contra el Stuttgart (2-2), gracias a un tanto en el minuto 97 de Robert Andrich, el Bayer Leverkusen sumó su partido oficial número 46 sin perder y superó al Rijeka y al Dinamo de Zagreb para conseguir un récord mundial del siglo XXI.
El tanto de Andrich permitió al equipo de Xabi Alonso estirar su marca de duelos imbatible. Hasta ese minuto 97 estaba empatado a 45 con el Rijeka y el Dinamo Zagreb, pero el acierto sobre la bocina del jugador del Leverkusen dejó una marca histórica para el conjunto alemán.
El Dinamo Zagreb estableció el récord de 45 cotejos sin caer entre noviembre de 2014 y septiembre de 2015, mientras que el Rijeka hizo lo mismo entre abril de 2016 y mayo de 2017. Ha tenido que pasar casi una década para que otro equipo, el Bayer Leverkusen, superara ese espectacular registro.
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