MUNDO
Juez de Nueva York pospone una semana la decisión sobre anulación de condena a Trump
EFE
El juez de Nueva York que presidió el juicio penal al expresidente Donald Trump pospuso una semana, hasta el 19 de noviembre, la decisión sobre la posible anulación de su condena, tras la petición de la defensa del magnate que pidió desestimar el caso.
El juez Juan Merchan tenía previsto este martes responder a una moción de la defensa para anular la condena de Trump en Nueva York. Sus abogados habían reclamado que se le aplique el fallo sobre inmunidad presidencial del Supremo de EE. UU. o, en su defecto, se considere que sus derechos como presidente electo son a estos efectos similares a los de un presidente en ejercicio.
Según correos electrónicos presentados en la corte, el abogado de Trump, Emil Bove, dijo este fin de semana que la «suspensión y la desestimación son necesarias para evitar impedimentos inconstitucionales a la capacidad del presidente Trump para gobernar», después de conocerse la victoria del magnate en las elecciones presidenciales de la semana pasada.
En mayo, un jurado popular dictaminó en un veredicto en ese tribunal en Nueva York que Trump era culpable de 23 casos de falsificación de documentos para silenciar a una actriz porno con la que había tenido una relación extramarital.
La sentencia fue programada en un primer momento para el mes de julio, pero Merchan accedió a retrasarla hasta el 26 de noviembre para evitar cualquier interpretación de interferencia electoral. Es decir, la decisión final de Merchan sobre si seguirá con el caso o lo desestimará se tomará solo siete días antes de una sentencia que podría ser histórica.
En este caso, Trump podría enfrentar hasta cuatro años de prisión, pero los expertos apuntan que lo más seguro es que Merchan opte por imponer una sentencia más corta, o tal vez una de libertad condicional o de visitas periódicas a una corte.
Trump niega haber cometido ningún delito, sostiene su inocencia y acusa a los demócratas de estar haciendo una «caza de brujas » contra él.
La condena penal de Trump fue la primera a un expresidente y, este mes, el republicano pasó a ser el primer delincuente convicto que llegará a la Casa Blanca.
MUNDO
Nicaragua niega en la ONU que viole derechos y no ofrece solución a retiro de nacionalidad
EFE
El Gobierno de Nicaragua negó este miércoles ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU todas las acusaciones de violaciones de esos derechos que recibió de otros gobiernos, entre ellos Estados Unidos, Brasil y Colombia, y no ofreció solución alguna para los cientos de nicaragüenses a los que ha retirado la nacionalidad.
El Consejo de Derechos Humanos (CDH) cumplió hoy con la revisión periódica de la situación en Nicaragua, que fue convencido por países cercanos -desde el punto de vista ideológico- de participar en este escrutinio, en el que inicialmente había decidido no tomar parte, dijeron a EFE fuentes de ese órgano intergubernamental.
Durante sus respuestas a los temas planteados por otros países, altas funcionarias de la Procuraduría General negaron las violaciones a los derechos a la manifestación pacífica y de reunión, de la libertad de expresión e información, y justificaron el cierre de miles de ONG y de universidades y la retitada de la nacionalidad a quienes el gobierno considera «traidores a la patria».
La procuradora nacional de la propiedad en la Procuraduria General, Jeanette García, dijo -por vía telemática- que el gobierno mantiene su decisión de no reconocer a la Corte Penal Internacional por considerar que «no ha dado muestras suficientes de imparcialidad» y que en Nicaragua no se censura el derecho a informar, sin ofrecer explicaciones sobre el cierre de numerosos medios de prensa independientes y el exilio de numerosos periodistas.
Frente a las críticas de los países por el cierre de 27 universidades y unas 5.300 organizaciones no gubernamentales, la procuradora aludió a la supuesta «falta de calidad y deficiencias» de las primeras, mientras que sobre las ONG sostuvo que entre las razones para su clausura estuvo el haber recibido fondos para «desestabilizar» al país.
Ni en estos casos, ni en el de los nicaragüenses a los que se quitó la nacionalidad -gran parte de los cuales también fueron desterrados del país- se planteó ninguna solución, a pesar de que este fue una de las principales peticiones de los países presentes en el CDH.
España denunció la «represión sistemática de la oposición política, el desmantelamiento progresivo del Estado de derecho, las violaciones al derecho a la libertad religiosa», así como la «privación de la nacionalidad, que España trata de contrarrestar ofreciendo la nacionalidad española» a los afectados.
Estados Unidos, como otros países, pidió que se libere a los detenidos arbitrariamente en Nicaragua y acusó al Gobierno de Daniel Ortega de «represión transnacional, que ataca a opositores políticos, expresos políticos y activistas en el extranjero».
La procuradora Carmen Soledad Rodríguez rechazó por su parte una alegación de Estados Unidos en relación a la participación en la represión de «grupos parapoliciales».
Sostuvo que la policía profesional ha sido la encargada de actuar «cuando ha tenido que restituirse el orden», aunque reconoció que cuando ha sido necesario han participado también «policías voluntarios, que actúan como cuerpo auxiliar y de apoyo de la Policía Nacional», quienes son ciudadanos corrientes, que se presentan por voluntad propia y de forma temporal.
En la fase de comentarios, México Panamá, Argentina y Chile, entre varios otros países, pidieron que se devuelva la nacionalidad a los nicaragüenses afectados, que se rectifique la cancelación de las autorizaciones para el funcionamiento de las ONG y que el gobierno vuelva a cooperar con los mecanismos de derechos humanos en la región y de Naciones Unidas.
Brasil pidió que se investigue y sancionen «a los responsables de la violencia contra minorías, sobre todo de indígenas y afrodescendientes (…) y se ponga fin a todo tipo de persecución religiosa».
Colombia indicó que «ve con preocupación el deterioro de los derechos humanos en Nicaragua, con el cierre del espacio cívico y las barreras para la pluralidad política». E
MUNDO
Hondureños lideran pedidos de asilo en frontera México-EE. UU.
Manuel Ayala
Los migrantes de Honduras representan el primer país de origen de los solicitantes de asilo en Estados Unidos que esperan en Tijuana, la mayor ciudad en la frontera norte de México, a donde siguen llegando pese a la incertidumbre que desató la victoria del presidente electo Donald Trump.
Jorge Rivera Manzo, director de gestión de Atención de Grupos Migrantes del Gobierno del estado de Baja California expuso que esta tendencia se ha mantenido durante este 2024, en la que figuran de manera consecuente personas de Guatemala, Haití, El Salvador y Afganistán.
“Son el top cinco que están llegando a Baja California y, en específico, a Tijuana. La mayoría de ellos, aproximadamente el 70 %, llegan ya con sus citas de asilo para ingresar a Estados Unidos, programadas previamente a través de la aplicación ‘CBP-One'», declaró a los medios.
Migración sin freno por la violencia
Pese a las promesas de deportaciones masivas de Trump, quien asumirá la presidencia de Estados Unidos el 20 de enero próximo, migrantes como Keylin Cruz indicaron a EFE que la violencia los obliga a salir de Honduras.
“Por la delincuencia, y a eso se sumó que mi casa se incendió accidentalmente, lo que nos llevó a quedarnos sin nada, ya que hace un tiempo atrás mataron a mi papá, mi hermano y a mi tía, y con todo esto me quedé en la calle y por eso fue la decisión de salir con mis hijos, ya que también necesitamos atención para una de mis hijas que padece de asma”, dijo.
Reiteró que muchos de sus conocidos y vecinos abandonan el país por las mismas razones de inseguridad y falta de oportunidades.
“Están saliendo muchas personas de mi país por la delincuencia, porque allá si se pone uno a trabajar, te cobran ‘impuesto’ (extorsión), hay que pagarles. Y si son dos maras hay que pagar dos impuestos y con esa situación no se puede tener un negocio porque si no se paga el impuesto vienen, se arremeten o lo matan a uno”, resaltó.
Aseguró que, para paliar esa situación, el Gobierno de su país “no ha sido de mucha ayuda».
“Está muy fea allá la situación económica, hay muchas madres solteras con sus niños y no hay empleo, y también hay que saber luego a quién le van a dejar sus niños (si se encuentra un trabajo) porque ahí hasta quieren reclutar a los niños más pequeños para que ya anden en la delincuencia y es muy grave”, destacó.
Consulado de Honduras promete protección
Edna Janeth López, quien hace un par de meses asumió como cónsul de Honduras en Tijuana, dijo a EFE que los objetivos principales de su gestión serán proteger, orientar y respaldar en todo proceso a todos sus conciudadanos que están llegando a esta ciudad, independientemente de los motivos por los que hayan salido.
Sostuvo que, por ahora, el Gobierno de Estados Unidos “está bastante abierto para ayudar a todos los ciudadanos que están llegando a México.
«No es que sea una frontera abierta, pero sí un Gobierno (el actual del presidente Joe Biden) que está aceptando a las personas y viendo cada caso para ver quién es merecedor del asilo», dijo.
Agregó que ya ha tenido reuniones con el Consulado de Estados Unidos, que manifestó que tienen planes “para ver cómo ayudarles con el proceso y ya no sea tan tedioso, porque antes era hacer el trámite con la aplicación y quedarse en México hasta seis meses o un año y están trabajando para acelerar los procesos”.
México busca diálogo con Trump
En tanto, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, señaló este miércoles que busca demostrar al equipo de Trump la aportación que hacen los migrantes y el comercio de México a la economía de Estados Unidos.
«Lo más importante es que, en el momento en que tengamos la oportunidad de reunirnos, ya sea con el equipo de transición del presidente Trump o una vez que tome la presidencia, (haya) este diálogo de alto nivel donde se vea lo que ha hecho México en temas de fentanilo, migración y en el tema económico», mencionó.
MUNDO
Biden inicia su reunión con Trump felicitándolo por su victoria en las elecciones
EFE
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, inició este miércoles la reunión en el Despacho Oval de la Casa Blanca con el próximo mandatario, Donald Trump, felicitándolo por su victoria en las elecciones del 5 de noviembre.
Cuando la prensa entró en el Despacho Oval, ambos líderes estaban sentados uno junto al otro en sillones, con el fuego de la chimenea crepitando de fondo.
Trump sonrió a la prensa, y a continuación, Biden, quien actuaba como anfitrión, le dio la bienvenida a la Casa Blanca y le extendió la mano para estrechársela con efusividad.
«Bueno, señor presidente electo, Donald, felicidades… espero que tengamos una transición tranquila. Bienvenido», dijo Biden, mientras Trump lo escuchaba con las manos entrelazadas e inclinado hacia adelante en el sillón.
Biden invitó a Trump a la Casa Blanca en una llamada telefónica el 6 de noviembre, al día siguiente de las elecciones, y el líder republicano aceptó de inmediato. La Casa Blanca anunció el sábado que la reunión sería este miércoles.
Este tipo de encuentros suele ser una tradición en la política estadounidense para garantizar una transferencia de poderes ordenada.
Sin embargo, en 2020 Trump no invitó a Biden a la Casa Blanca tras su victoria electoral.
De hecho, el republicano difundió teorías infundadas sobre fraude y ni siquiera asistió a la investidura de su sucesor, convirtiéndose en el primer presidente de EE.UU. en no hacerlo desde 1869.