La historia del hombre detrás del mito, eso es Mystify: Michael Hutchence, el documental acerca de la vida del cantante de INXS. Nunca fui admirador número uno de esta agrupación australiana, pero la imagen de Hutchence siempre estuvo presente durante mi juventud, junto a algunas canciones que me encantan como Beautiful Girl, Disappear y Elegantly Wasted.

Siempre hubo cierta tristeza al recordarlo, debido a su misteriosa y decadente muerte, a los 37 años. ¿Un acto sadomasoquista que salió mal? ¿En serio? Eso han publicado los medios desde 1997. Aclarar este fatídico final, además de adentrarse por completo en la vida íntima del músico, es la misión de Mystify: Michael Hutchence.

Me senté en casa a ver este documental con el objetivo de sentir algunos episodios eléctricos de nostalgia, pero me encontré con un monstruo diferente. Este filme, de manera muy gratificante, es más que una historia acerca de un rockstar que nace, crece de manera disfuncional, consigue éxito, se llena de drogas, y muere. Hay más: muestra un alto contenido íntimo en el que se explora el poco valorado arte de conocernos a nosotros mismos.

Me encantó que en vez de ser una obra talking head, en la que se ven muchas personas hablando de un tema, el director Richard Lowenstein decidió graficar todos los testimonios con imágenes que el propio Hutchence grabó con su cámara de video. El valor de esta decisión es que nos deja ver lo que el cantante grababa, que termina siendo lo que a él le interesaba capturar de la vida: arte, cultura, experiencias nuevas, viajes en carro, amigos y novias (entre ellas la modelo Helena Christensen, la cantante Kylie Minogue y la conductora de televisión Paula Yates).

Como muchos, Hutchence llevó una vida exitosa, pero llena de excesos: de amor, de creatividad, de fama y de culpa. Y a esto se le añade un secreto que se devela al final.

Cargar con culpa es una tarea difícil y dolorosa, y desprenderse de estos sentimientos no es tan fácil como uno quisiera. Así como la culpa resulta un elemento de motivación para llegar a lugares y situaciones importantes, con el tiempo detereriora a cualquier individuo.

¿Cómo podemos salvar un alma doliente? ¿Cómo podemos evitar llegar a serla? ¿Cómo podemos dejar de ser esos seres inseguros a quienes se nos dificulta enfrentar lo que la vida nos deja caer encima?

Despido esta columna con una frase de Never Tear Us Apart, de INXS: “Te dije que podríamos volar/porque todos nosotros tenemos alas/pero algunos de nosotros no sabemos por qué”. ¿No lo sabías, Michael? ¿O lo olvidaste en el camino?

David Lepe