La Organización de Naciones Unidas (ONU) anunció ayer una investigación sobre los abusos perpetrados contra civiles, incluidos trabajadores humanitarios, por soldados sursudaneses en Juba, así como por la inoperancia de los cascos azules ante los hechos.
El secretario general Ban Ki-moon se declara preocupado por acusaciones de que la Minuss (Misión de Asistencia de la ONU en la República de Sudán del Sur) no reaccionó de manera apropiada para prevenir esos graves actos de violencia sexual. “Una indagación determinará los incidentes y evaluará la reacción de la Misión”, indicó Ban, declarándose escandalizado por los ataques cometidos por las fuerzas gubernamentales y de oposición en Juba del 8 al 11 de julio.
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