Un grupo de científicos argentinos ha desarrollado una mascarilla para “uso social” con capacidad antiviral y antibacteriana, que se puede lavar hasta 15 veces y que reduce las probabilidades de penetración en el organismo del coronavirus ocasionante del Covid-19.
Dicho barbijo es un trabajo conjunto de varias instituciones; entre ellas, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet), que buscaba elaborar un producto asequible. Para ello, los científicos modificaron telas de algodón y poliéster con un agregado polimérico al que añadieron, por un lado, iones de cobre, que son los que más carga antiviral tienen, y, por otro, nanopartículas de plata, otro de los metales con actividad antimicrobiana.
5
millones de mascarillas serán fabricadas cada mes.
“Esta combinación, más la incorporación del impermeabilizante, disminuye la posibilidad de que las microgotas que transmiten el virus puedan atravesar la tela”, dijo a periodistas Roberto Candal, investigador principal del Conicet.
Esta mascarilla se suma a otras innovaciones científicas llevadas a cabo por Argentina para frenar los contagios, como es el caso del suero hiperinmune o de los kits rápidos de diagnóstico para Covid-19, entre otras. Buenos Aires, EFE
