De este modo, la capacitación se da por lapsos cortos, pero puede ser continua y facilita la formación integral del individuo con unos propósitos definidos. En el contexto descrito, es una realidad que toda institución necesita capacitar a su personal, para que realice el trabajo con efectividad y eficiencia. El personal nuevo debe ser sometido constantemente a períodos de entrenamiento, pero también es necesario entrenar al personal que ya tiene tiempo dentro de la organización, incluso a los directivos; para la mejora, innovación y calidad.
Actualmente en la práctica es poco probable que el anterior extremo sea tangible, es decir, que se puede percibir de manera clara y precisa, salvo casos aislados, es poco probable que se capacite al personal de nuevo ingreso a cualquiera institución y más poco probable que se le dé continuidad a los antiguos colaboradores, sea por falta de la unidad de capacitación del departamento de recursos humanos respectiva, por falta de recursos económicos, por apatía laboral de los superiores jerárquicos o por desorden administrativo. Según Chiavenato (citado por Rodríguez 2005, p.37): “la importancia de los programas de capacitación radica en el hecho de que los individuos que se beneficien tendrán una larga o mediana permanencia dentro de la organización; estos permiten que la organización cuente con un personal altamente calificado”. En otras palabras Chiavenato (2000, p.558), establece que: “su importancia reside en el alcance de los objetivos de la organización, proporcionando oportunidades a los empleados de todos los niveles para obtener el conocimiento, la práctica y la conducta requeridos por la organización”. En este sentido, la capacitación no es un gasto, sino una inversión, cuyo retorno es bastante compensatorio para la organización.
Para Guerrero J. (2015) “Si una organización, sea cual fuere su misión no se interesa por formar a su personal se puede quedar en el pasado por cuanto la investigación en el ámbito mundial genera nuevos conocimientos en las diversas áreas y este debe ser asumido por cuanto se desarrolla sobre la base de una realidad actual”. Es así que el conocimiento innovador va desplazando al anterior. Con la aplicación de la capacitación, el fin último de toda organización es mejorar en todo su ámbito la ejecución de su misión y permitir que se lleve a efecto con plena disposición y armonía.