El Congreso de la República aprobó este día la Ley para la Simplificación de Requisitos y Trámites Administrativos, conocida como Ley Antitrámites, una normativa que permitirá la facilitación y digitalización de las gestiones administrativas, lo que favorecerá principalmente a las empresas.
Es una ley de beneficio común. “Sienta las bases para un nuevo modelo de administración, ya que hace mandatorio el uso de las tecnologías de la información y comunicación para la simplificación de los servicios que el Gobierno presta al ciudadano”, pronunció Enrique Cossich, titular de la Comisión Presidencial de Gobierno Abierto y Electrónico.
Para el jefe del Ministerio de Economía, Antonio Malouf, con la ley se facilitarán los trámites electrónicos para las diligencias que se quieran realizar en las carteras y registros públicos.
La norma, impulsada por la referida comisión y el Mineco, también favorecerá la atracción de inversiones y la competitividad del país. Es una norma no para beneficio del Gobierno, sino para poner restricciones al Organismo Ejecutivo en beneficio de la ciudadanía, ha indicado Lisardo Bolaños, viceministro de Inversión y Competencia de la cartera.
Con el beneplácito de los diputados, la nueva ley entrará en vigencia 3 meses después de su publicación en el Diario de Centro América.
