La Comisión de Postulación a Fiscal General y Jefe del Ministerio Público entregó al Presidente de la República un listado de seis profesionales, para que el mandatario eligiese a quien en los próximos cuatro años tendrá la responsabilidad de dirigir los destinos de la institución que tiene la responsabilidad constitucional del ejercicio de la acción penal y el perseguimiento penal. En la columna anterior señalé que los seis profesionales son altamente capaces académicamente y que, por supuesto, tendrían sus detractores.
Lo cierto es que ya ha sido designada la doctora en derecho, abogada y notaria María Consuelo Porras Argueta, que, dicho sea de paso, fue calificada con una de las más altas notas por la Comisión Postuladora. Con los 35 años de experiencia en el sector justicia, y haberse desempeñado ya como fiscal y conocer por dentro el Ministerio, tendrá claro que tendrá sobre sus hombros la responsabilidad de aportar, junto a su equipo de trabajo, las pruebas irrefutables de que él, la, los o las sindicadas de un delito, lo cometieron. De suerte, que quienes integrarán el equipo de la fiscal general electa son profesionales de reconocida trayectoria nacional e internacional.
He de insistir en un punto que mencioné en la columna anterior, para el período que le tocará a la doctora Porras Argueta, será la implementación de la presencia del Ministerio Público a nivel nacional. La población espera que el fruto del trabajo que desempeñe sea de beneficio para el país y el fortalecimiento del sistema judicial.
