Sebastián toledo
En el marco del Día Internacional de la Mujer, la Asociación Nacional de Ciegos de Guatemala promueve, desde hace más de 10 años, el foro: Yo También Soy Mujer, un evento donde se han venido analizando los principales desafíos de la mujer con discapacidad. Oportunidad en la que también se aprovecha para rendir homenaje a quienes sobresalen en las distintas actividades, pues si tener una discapacidad genera exclusión, cuando se suman a esta situación otras condiciones de vida, se remarcan los actos de discriminación.
En el foro 2023, se hará un análisis sobre la participación de la mujer con discapacidad en la toma de decisiones sobre los asuntos públicos y políticos del país, tema que se asume en el contexto del proceso electoral del presente año. Una actividad por realizarse en la sede de la organización promotora, donde se espera contar con la intervención de 125 lideresas, tanto de la ciudad capital como de las áreas
departamentales del país.
Los temas que se abordarán están encaminados a reflexionar sobre la participación de la mujer con discapacidad en el desempeño de cargos públicos, su papel en la gestión y administración organizacional y los desafíos que le presenta el mundo moderno. Para el efecto, se integrará un panel de mujeres con y sin discapacidad, tomando como punto de partida que el centro del análisis será la reflexión sobre los aportes de las mujeres con discapacidad.
Se aprovecha para rendir homenaje a quienes sobresalen en las distintas actividades.
Los organismos que en esta oportunidad apoyarán la organización y promoción del foro son: la Fundación Internacional para Sistemas Electorales, el Instituto Holandés para la Democracia Partidaria y la Christian Blinden Mision. Además, y como en años anteriores, se contará con el apoyo del Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala.
Los índices de exclusión de las personas con discapacidad en general en Guatemala son altamente preocupantes, ya que solo el 10 por ciento concluye la educación primaria, más del 85 por ciento no tiene acceso al empleo, y más del 75 por ciento no cuenta con servicios básicos de salud. Estos porcentajes se remarcan con mayor severidad en las mujeres con discapacidad, especialmente en las áreas rurales del país, donde proliferan barreras físicas, de comunicación e información, que acentúan la desigualdad, tema que debe superarse con el esfuerzo del Estado en su conjunto.