Conadi trabaja para poder realizar la segunda encuesta nacional de discapacidad.
En Guatemala se carece de registros oficiales sobre la prevalencia de discapacidad, no obstante que el tema se ha incluido en los censos de población que realiza el Instituto Nacional de Estadística –INE-, pero se han obtenido resultados que no reflejan la realidad del país, por lo que se hace necesario contar con datos actualizados, para dar cumplimiento al artículo 31 de la Convención Sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, y en función de ello, promover una política pública dirigida a la atención y demandas de las necesidades de la población.
En concordancia con esta orientación de las Naciones Unidas, a través de la Convención, el Consejo Nacional para la Atención de las Personas con Discapacidad (Conadi) realizó acercamientos en el 2015 con la Organización Internacional Cristopher Blinden Mission CBM, para llevar a cabo en el 2016, la segunda encuesta nacional de discapacidad, de tal manera que se pueda disponer de una herramienta que oriente a las distintas instituciones públicas, en la implementación o inclusión de la temática de discapacidad en sus programas.
La encuesta se realizará entre los meses de mayo y noviembre, para que en diciembre se puedan entregar los resultados a las autoridades de gobierno, este esfuerzo contará también con el apoyo de Unicef, el Instituto Nacional de Estadística y la Universidad de Medicina Tropical de Londres, por lo que es un proyecto que ofrece un alcance de trascendencia a las entidades que ejecutan programas para personas con discapacidad.
Además de ser un importante aporte a las entidades vinculadas a esta temática, es un instrumento que permitirá a las personas con discapacidad la formulación de propuestas en función de sus necesidades, por lo que dejar de realizar esta encuesta, será una lamentable situación para el país, particularmente, para la población con discapacidad que siempre ha estado marginada y excluida de la agenda nacional de desarrollo.
La encuesta se ve en riesgo, ya que la misma está incluida en el plan operativo anual del Conadi, pero ante la baja recaudación fiscal experimentada en el 2016, los fondos destinados para su cumplimiento no han sido trasladados en casi un 40 por ciento, situación que además de afectar este importante proyecto, también hará que muchas actividades dirigidas a las organizaciones del colectivo dejen de llevarse a cabo, lo que ubica al país entre las naciones que no da prioridad a los asuntos de discapacidad, pese a los compromisos adoptados.
Al mes de marzo, Conadi ha dejado de percibir 1.3 millones de quetzales de su presupuesto ordinario, cantidad que no resuelve los grandes problemas del país y que no es una cifra nada comparable con los presupuestos de otras entidades, pero que para los asuntos de discapacidad gestionados desde el CONADI, sí representan graves y lamentables consecuencias, por lo que es urgente atender la situación para no poner en riesgo un proyecto de país.
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