La preocupación y ansiedad se han apoderado de la Universidad de San Carlos, que está a punto de caer en el puesto del descenso directo; una unidad la separa de su feroz perseguidor, Malacateco.
Los carolinos lucen desorientados desde la fecha 9, cuando obtuvieron su última victoria, frente a Comunicaciones. Los tropiezos en las siguientes jornadas se han convertido en una tormenta de verano, y la presión por ganar se intensifica.
El sábado se enfrentan al campeón, Antigua, que tampoco pasa por un buen momento en el Torneo Clausura, pero que seguramente no será presa fácil, aún como visitante.
La falta de producción ofensiva y las desconcentraciones en la zaga en minutos cruciales son algunos de los factores que han sumido a los sancarlistas en el sufrimiento y los tienen como candidatos a descender.
Jugar de local es una fortaleza para los equipos, pero para los de Ramiro Cepeda es sinónimo de nerviosismo. El 60 por ciento de sus cotejos los han perdido y empatado.
Sin embargo, estar en casa le abre la posibilidad a la Usac de volver a ampliar la ventaja sobre los toros, que tendrán una prueba difícil en el feudo escarlata.
El arquero David Guerra se recuperó de la lesión y es opción para el compromiso contra los antigüeños, igual que Fredy Ruano, quien regresa de una suspensión. Cristian Ojeda es la única baja, por acumulación de tarjetas.
Deja un comentario