Comunícate con nosotros al 1590

COLUMNAS

Representaciones del sol en el arte navarro (II)

Publicado

-

Ricardo Fernández Gracia

Director de la Cátedra de Patrimonio y Arte Navarro

Christus in eucharistia est Sol: El sol cual luz tuvo significado divino, desde fechas muy tempranas, hecho que recogen los evangelios: “Yo soy la luz del mundo” (San Juan, 8, 12). También lo incluyen los Padres de la Iglesia, como san Juan Crisóstomo quien, hablando de Cristo en la Eucaristía, lo llamó sol: Christus in Eucharistia est Sol. No nos sorprenderá que la parte superior, de los ostensorios, en los que se expone el Santísimo Sacramento, denominada sol, se simule un círculo con rayos rectos y flameados para representar los rayos del astro rey, rematados en ocasiones por pequeñas estrellas de varias puntas y enriquecidos con esmaltes, corales y piedras de colores, en aras a proporcionarles riqueza y colorido deslumbrante. Desde el siglo XVI a nuestros días, se conservan en nuestros templos, ejemplares realizados por orfebres locales y otros importados de otros centros artísticos como Córdoba, Zaragoza o Madrid, así como otros enviados desde Nueva España, Guatemala o Perú.

Con el mismo contenido eucarístico encontramos al sol en relieves de expositores y tabernáculos, ornamentos religiosos y colgaduras destinadas a la fiesta del Corpus Christi y su octava, destacando la de talleres aragoneses del monasterio de Fitero, que data del tercer cuarto del siglo XVIII. Entre las puertas de sagrarios con el astro rey, con delicados rayos y facciones humanas en el rostro, destaca el de la capilla de San Román de Sangüesa, obra de Pedro Onofre de Coll (1722). 

Electa ut sol: No menos presencia tiene el sol en la iconografía de la Inmaculada Concepción, concretamente en el modelo apocalíptico, en donde se le recrea como mujer vestida de sol, siguiendo el texto de San Juan. En una tabla del retablo renacentista de Tulebras, su imagen está dentro de la propia aureola solar, es obra de Jerónimo Cosida (1565-1570). Lo mismo ocurre en el relieve de la misma visión en Patmos del retablo mayor de Peralta, obra de Diego de Camporredondo (1772).

Encontramos al sol en relieves de expositores y tabernáculos, ornamentos religiosos y
colgaduras.

En las versiones barrocas del tema, los rayos solares de rico colorido sirven de fondo a su figura, creando un contraste vivo con el tono azul de su manto y los ángeles, que suelen portar los epítetos de las letanías. En algunas pinturas el sol, cual astro en forma circular, figura en las representaciones inmaculistas, como en las tablas de la Tota pulchra de Artajona y Olite o los lienzos de José de Fuentes de Cascante (1647) y Vicente Berdusán de Tudela (1663). No faltan algunas representaciones en donde el astro rey tiene rasgos humanos, como el de Juan Correa (1701) de las Dominicas de Tudela, o el frontal napolitano (c. 1670) y la capa del terno dieciochesco de las Agustinas Recoletas de Pamplona.

En los modelos escultóricos, el sol suele ser unas ráfagas doradas de rayos rectos y flameados, como las que lucen las tallas de Manuel Pereira en las Agustinas Recoletas de Pamplona, Arróniz, Ablitas o catedral de Pamplona y un sinnúmero de imágenes. En ocasiones, la ráfaga solar se hizo se hizo en plata, como la de la Purísima de Cintruénigo o la que luce la Virgen del Cólera de Olite, que data de 1729 y es obra del platero Antonio Ripando.

Al sol hicisteis parar: Entre los grandes milagros atribuidos a san Francisco Javier, divulgados en pintura y en sus gozos, destaca el de la parada del sol. En uno de los lienzos de la serie pintada para el castillo de Javier por el pintor flamenco Godefrido de Maes, en 1692, se recreó aquel pasaje. Se trataba de emular a Josué, cuando éste hizo detener al rey de los astros en la batalla contra los amorreos.

Las biografías de Javier, conocido como “el sol de Oriente” por una popular comedia jesuítica, relatan cómo libró de sucumbir a los cristianos de Travancor, atacados por los Bagadas. 

Continuará…

Universidad de Navarra
Seguir leyendo

COLUMNAS

Buenas prácticas para mejorar la gestión pública (I)

Publicado

-

Israel Gómez Córdova
Jefe Departamento de Documentación y Divulgación
[email protected]

En la búsqueda de un mejor y más eficiente servicio al ciudadano, la gestión pública constituye un paradigma de gestión, que combina los papeles de empresario y gerente. En este sentido, se plantea una modificación en el método de redistribución de los bienes y cargas esté orientada al ciudadano, posibilitando así, un auténtico reflejo de la inserción de la perspectiva privada dentro del sector público.

Esto implica, entre otras cuestiones, que la actual gestión pública se aproxima al sistema utilizado en las empresas privadas, en términos de búsqueda de una mejor eficiencia y eficacia del servicio que se presta, pues en ocasiones se cumple aquella paradoja de la implantación de la imagen del Gobierno, cuya idea es que el sector público esté en manos de funcionarios públicos dotados con un control activo, visible y discrecional sobre las instituciones.

Se anteponen los resultados a los procedimientos, y se enfatiza la importancia de la evaluación.

En este sentido se puede denominar neogerencia, desarrolla un diseño de objetivos por resultados, donde se formulan estándares explícitos y medidas de rendimiento, así como la definición de metas e indicadores de éxito, preferentemente expresados en términos cuantitativos.

Así, la responsabilidad es configurada con base en una declaración nítida de metas, de modo que se pone énfasis en los controles de resultados, en tanto que la asignación de recursos se asocia a medidas de rendimiento. Asimismo, se anteponen los resultados a los procedimientos, y se enfatiza la importancia de la evaluación y la eficiencia.

Así, al ser hoy la democracia un concepto supranacional, la sociedad civil, entendida como la sociedad organizada y ponderada de acuerdo con el poder que tienen los diversos grupos e individuos, se constata como avanza ese continuo requerimiento de atenciones del ciudadano sobre las administraciones e incluso sucede una crítica constante a las fórmulas de gestión de estas.

Desde este punto de vista, la sociedad es un factor importante para tener en cuenta en la gestión pública y en su efectividad y eficiencia, que a todas luces traspasa las fronteras nacionales y se configura desde nuevas agendas sociales, culturales, políticas y económicas cada vez más globales. Además, hay que tener muy en cuenta que aplicaban soluciones que hoy podrían ser perfectamente aceptadas, en materia de desarrollo de mejoras administrativas.

Continuará…

Colaborador DCA
Seguir leyendo

COLUMNAS

Multilateralismo y cero desechos

Publicado

-

António Guterres

Secretario General de las Naciones Unidas

[email protected]

Importancia del multilateralismo y la diplomacia para la paz. El 24 de abril de cada año se pone de manifiesto una verdad fundamental: ningún país puede resolver los problemas actuales por sí solo. 

El diálogo, la diplomacia y las soluciones multilaterales son el camino más seguro hacia un mundo en paz y más justo. 

Son ideales intemporales que cimientan la Carta de las Naciones Unidas (en vigencia desde el 24 de octubre de 1945) y que impulsan los esfuerzos mundiales para proteger los derechos humanos y así forjar paz, esperanza y prosperidad para todas las personas. 

No obstante, por todo el mundo hay conflictos, catástrofes climáticas, pobreza y desigualdades que plantean enormes obstáculos a la diplomacia y las soluciones multilaterales. La lucha por espacios altamente competitivos afecta el ambiente de colaboración; la implacable división acaba con el diálogo. 

El diálogo, la diplomacia y las soluciones multilaterales son el camino más seguro hacia un mundo en paz y más justo.

La diplomacia y el propio sistema multilateral se crearon precisamente para momentos como este. Debemos crear condiciones para un nuevo espíritu de cooperación global para reconstruir la confianza, reducir las divisiones confrontativas y orientar a la humanidad hacia la paz. 

La Cumbre del Futuro que tendrá lugar el próximo septiembre será una oportunidad decisiva para que los países encuentren soluciones en común. Con una Nueva Agenda de Paz que aborde los factores de conflicto de forma holística se puede ayudar a restablecer la fe en el sistema multilateral y en lo que podemos conseguir trabajando unidos. 

En este importante día, exhorto a los Gobiernos y a los dirigentes a que no escatimen esfuerzos para salvar las diferencias, renovar el diálogo y la confianza y hacer posible un futuro de paz. (Objetivo de Desarrollo Sostenible -ODS- 17: Revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo
Sostenible).

Hacia una cultura cero desechos.  Nuestro planeta se está ahogando en un torrente de basura. 

Cada año, la humanidad produce más de 2 mil millones de toneladas de residuos sólidos municipales. Alimentos podridos, botellas de plástico, aparatos electrónicos contaminados con productos químicos y un sinfín de cosas más se desechan sin tener en cuenta el agua, la tierra y el aire. 

Al descomponerse, la basura emite gases de efecto invernadero que se van hacia la atmósfera incrementando el calor al planeta, y también afectando la calidad del agua y del suelo, lo cual provoca enfermedades e incluso la muerte de personas en todo el mundo.  También es cierto que el consumo excesivo nos está matando. Tenemos que hacer algo.  

Desde el año pasado, la Junta Consultiva sobre Cero Desechos viene reuniendo a los asociados en torno a esta cuestión crítica y a lo que hay que hacer para conseguir que el ideal de cero desechos sea una realidad. 

Las empresas deben repensar sus productos a fin de minimizar el derroche de envases y maximizar la longevidad y el ciclo de vida de los productos. 

Los consumidores deben pensar dos veces antes de adquirir bienes y productos, y reciclar o reutilizar siempre que sea posible. 

Los gobiernos a todos los niveles deben crear economías circulares que aborden el agotamiento y la gestión de los recursos, e invertir en programas modernos de control de desechos basados en la reutilización, el reciclado, la recuperación y la prevención de la producción de desechos. 

Por su parte, la comunidad mundial debe unirse y trabajar por lograr un tratado jurídicamente vinculante para poner fin a la contaminación por plásticos. 

Cada 30 de marzo conmemoramos el día de Cero Desechos. Comprometámonos a poner fin al ciclo destructivo de los desechos, de una vez por todas. (Objetivo de Desarrollo Sostenible, ODS 12: Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles).

Colaborador DCA
Seguir leyendo

COLUMNAS

¿Es posible un mundo sin plásticos? (I)

Publicado

-

Andrea Cocchini 

Profesor de Derecho Internacional de la Universidad de Navarra

El 22 de abril, como cada año desde 1970, se celebra el Día Internacional de la Tierra, la jornada más importante dedicada a la protección del medioambiente. En esta ocasión, la organización Earth Day ha elegido el lema Planeta versus plástico. El movimiento tiene como aspiración “reducir en un 60 por ciento la producción de plásticos de aquí a 2040 para construir un futuro sin plásticos para las generaciones venideras”.

Durante el Día de la Tierra de este año, todas las iniciativas estuevieron  enfocadas a informar y sensibilizar a la opinión pública sobre los perjuicios que la contaminación plástica supone para la salud humana, la biodiversidad y el medio ambiente y sobre las medidas necesarias para atajar el problema.

Todas las iniciativas estuvieron enfocadas a informar y sensibilizar a la opinión pública. 

Entre ellas, la Earth Day menciona la necesidad de impulsar con urgencia la adopción del futuro tratado contra el plástico, incluido en el Programa para el Medio Ambiente de las Naciones Unidas y que se está trabajando con los estados desde 2022 en el Comité Intergubernamental de Negociación sobre la Contaminación por Plásticos (INC, por sus siglas en inglés).

Al margen de que se prevea finalizar un tratado dentro de 2024, es muy probable que el acuerdo que resulte de las negociaciones no esté a la altura del ambicioso objetivo que se proponen los promotores del Día de la Tierra.

Se prevé que la producción mundial de termoplásticos ascenderá a 445.25 millones de toneladas en 2025 y que los volúmenes anuales de producción seguirán aumentando en las próximas décadas hasta alcanzar aproximadamente los 590 millones de toneladas en 2050. Esto supondría un incremento de más del 30 por ciento con respecto a 2025.

Colaborador DCA
Seguir leyendo

Directorio

  • Dirección General: Carlos Morales Monzón
  • Coordinación General de Redacción: Miguel González Moraga
  • Coordinación de Información: Mario Antonio Ramos
  • Editores: Carlos Ajanel Soberanis, Jose Pelico, Erick Campos, Katheryn Ibarra y Max Pérez
  • Página Web: Isabel Juárez

más temas

©2024 Diario de Centro América - Todos los derechos reservados.