Revista Viernes
Parque Actún Kan, un destino imperdible
Naturaleza, cuevas y educación en la capital del mundo maya
Ubicado a cuatro kilómetros de la isla de Flores, en Petén, el parque regional municipal Actún Kan es un refugio natural que invita a exploradores, amantes de la naturaleza y familias a sumergirse en un laberinto de cuevas, conocer un entorno rico en biodiversidad y un compromiso con la conservación y educación ambiental.
Las cavernas son el principal atractivo del lugar, y ofrecen dos opciones de recorrido. En la primera, los visitantes pueden elegir entre explorar las cuevas solos o acompañados por un encargado.
Este recorrido es de un kilómetro y permite conocer entre 25 y 30 estalactitas, estalagmitas y columnas en una travesía que dura entre 45 minutos y una hora. El costo de esta experiencia es de 25 quetzales para guatemaltecos y 35 quetzales para extranjeros.
Se ofrece una experiencia más desafiante conocida como la Aventura Extrema. Este trayecto debe realizarse obligatoriamente con un guía, quien lleva a los exploradores a adentrarse en las profundidades de las cuevas, poniendo a prueba su resistencia física y determinación.
Los aventureros podrán recorrer cerca de 2.5 kilómetros dentro de las grutas, ingresando por Actún Kan y saliendo en las cuevas de Juvitzinaj. Este tramo, que incluye pasar por espacios reducidos, húmedos y oscuros, dura entre 1.5 y 2 horas, y permite conocer las más de 50 formaciones rocosas que se han identificado durante la ruta. El costo es de 35 quetzales para los visitantes nacionales y 45 quetzales para los foráneos.
Santuario ecológico
Más allá de las cuevas, es un refugio para una vasta diversidad de flora y fauna. Senderos señalizados permiten a los visitantes adentrarse en la vegetación y descubrir la vida silvestre que habita en este ecosistema. Pequeños primates, roedores, aves, anfibios, reptiles, insectos y una variedad de plantas endémicas son solo algunos de los habitantes que hacen de este lugar un santuario natural.
Fredy Villatoro, técnico de la Fundación Pro-Petén y parte de la administración del parque, explicó que en un esfuerzo por promover la educación y la conservación, actualmente se construye una biblioteca biológica. Este innovador proyecto tiene como objetivo educar tanto a la población local como a los turistas sobre la diversidad de plantas y animales que viven en la región, su importancia ecológica y las medidas necesarias para su conservación.
Según Villatoro, la biblioteca será un centro de aprendizaje interactivo, que ofrecerá recursos educativos, talleres y programas de investigación que beneficiarán a estudiantes, investigadores y turistas por igual. “Al enfatizar la importancia de la biodiversidad y la conservación, este proyecto no solo enriquecerá el conocimiento de los visitantes, sino que también fomentará un sentido de responsabilidad hacia la protección del medioambiente”, explicó.
Destino para todos
Actún Kan es más que un simple destino turístico, es un lugar donde la naturaleza y la cultura se entrelazan, ofreciendo una experiencia enriquecedora para todos. Ya sea explorando las cuevas, caminando por los senderos naturales o aprendiendo en la biblioteca biológica, cada visita promete ser una aventura inolvidable.
Para aquellos que buscan una escapada llena de descubrimientos y aprendizaje, el parque es ideal. Se encuentra a tan solo 12 minutos en vehículo desde la cabecera departamental de Petén. Cuenta con amplio parqueo, juegos infantiles, baños y espacios para descansar y disfrutar de una merienda. Con su combinación de belleza natural, oportunidades de exploración y un compromiso con la educación ambiental, Actún Kan se destaca como un ejemplo de turismo sostenible en Guatemala.
Revista Viernes
Construcciones geométricas que involucran temática social
El artista y arquitecto Jorge Luis Linares explora por medio de su arte las dinámicas de una cultura industrializada y de consumo masivo
la que monté exposiciones y me especialicé en grabado. Me gustaron mucho las artes gráficas, la fotografía y arquitectura, un día pasé por la facultad donde observé las maquetas y dije que podría realizarlas. Así que a partir de ese momento estudié esa carrera por si como artista no me iba bien económicamente, pero esta última profesión es mi mayor fuente de ingresos.
¿Cómo combina sus dos profesiones?
Cuando inicié me costó, pero poco a poco comencé a trabajar proyectos relacionados con arquitectura y cultura porque laboré para ingenieros, en urbanística y como modelador 3D. Realicé cuatro proyectos con el arquitecto Álvaro Veliz, de quien he aprendido muchísimo.
Fue alumno del reconocido artista Daniel Schafer, ¿cómo fue esa experiencia?
Haber recibido clases de uno de los grandes artistas fue una gran experiencia y me impresionó mucho porque sí le abría a uno el campo al pensamiento crítico. Son personas que lo marcan con su formación y también en el dibujo de diseño, del cual era una eminencia.
¿Por qué selecciona la temática social en sus piezas?
La sociedad y el arte son un reflejo de un país, aunque respecto al tema de la contaminación visual la idea surgió cuando estaba en el tráfico: imaginé cómo sería si toda esa situación se fuera desplazando para arriba como un efecto visual, pero fue como un sueño vivido dentro del caos vehicular. Igual sucedió con el videoarte de Fluctuaciones, iba en el tránsito y vi una gasolinera con un letrero dañado y me quedé con la imagen en la cabeza para trabajarla después.
Asimismo, salió el tema de la economía porque no lo había abordado como tema central de una muestra y es precisamente esta que se encuentra en Punto D Contemporáneo. Por ejemplo, los dibujos de billetes que elaboré con papel negro libre de ácido y tinta blanca, que por cierto, así retomé la pintura, concibe el concepto del lavado de dinero.
He tomado las dinámicas sociales y culturales y más de la ciudad, las cuales generan todo este tipo de fenómenos como la carga vehicular, la contaminación visual o de los desechos sólidos que es un gran problema que tenemos aquí con el río las Vacas, que es de los más contaminados de Guatemala.
El artista debe hablar desde su experiencia y la mía son estos paisajes, la carretera, etc., que he investigado y tratado desde otro punto de vista. También, como agente externo que va a otro lugar, como cuando fui a Ciudad de México, donde realicé un video llamado Formas + Velocidad, el cual me gusta mucho y es de los pocos en los que utilicé efectos visuales. Con mi cámara grabé en el metro su velocidad y cómo el paisaje se iba barriendo, pero fue un efecto visual; igualmente, en la Torre Latinoamericana capté a las personas y lo nombré la Aceleración de los cuerpos, de cómo como las masas se estaban moviendo.
¿Esperaba el primer lugar de Juannio? Cuéntenos.
Me rechazaron como cuatro veces, la primera ocasión porque debía ser mayor de edad. Hubo un momento en el cual me dije que por disciplina siempre aplicara y este año participé con un video, que tampoco es un medio muy popular para el coleccionista, cuyo proceso disfruté mucho porque grababa solo en la calle. A veces me acompañaban, y se siente cierta adrenalina.
¿Cuál es su proceso creativo?
Tengo bien establecido y parto desde la idea de las investigaciones estéticas no teóricas estéticas, por eso creo que trabajo muchas series. Abordo el arte a través de este método y cito el ejemplo de ir cada año a las pasarelas de la Calle Martí y tomar fotografías; de esta manera observo cómo va cambiando el paisaje, los buses y la publicidad, entre otros detalles. Años atrás creé algo de la región del Corredor Seco que me pareció vital, y como tengo familia de oriente, aprovecharía plantear su paisaje. Quiero salir de mi zona de confort que es la ciudad y trabajar más en el campo.
La parte teórica para mí es fundamental, pero me baso más de los estudios estéticos, desde la parte visual de la comunicación, por eso economía del lenguaje es un juego de palabras con relación a lo audiovisual. A veces es decir poco con mucho, y considero que cualquier persona lo puede asimilar, sin saber demasiado de arte.
El artista se nutre de la audiencia, ¿cuál ha sido esa retroalimentación en sus exposiciones?
Cualquier observador complementa la obra, yo solo sugiero algo y concibo una idea de lo que deseo, pero me interesa que venga la audiencia y lo termine, eso me enriquece mucho. Que las personas me hablen de lo que sintieron cuando vieron las obras.
De la mayoría de series, me parecen que se identifican mucho con la de la contaminación visual porque la gente lo vive, pero no se toman el tiempo de analizar que eso afecta la calidad de vida. Hay estudios que citan que el ruido daña la salud de las personas y debería regularse. Esta permaneció en arte en las calles y en muchas exposiciones; por ello, muchos se identificaron.
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Traicionado por un sacerdote
Ilustración: Sergio Espada
Manuel Tot nació en 1780 y falleció en 1820. Fue un indígena prócer de la Independencia, que nació en San Juan Chamelco, Alta Verapaz. Durante su juventud, sirvió a frailes dominicos.
Su participación en las justas de independencia sucedió en 1813, cuando fue partícipe de la Conjuración de Belén, y ofreció movilizar 15 mil indígenas a la capital. Al momento en que fueron delatados los participantes, Tot trató de huir a México; sin embargo, en San Marcos enfermó con fiebres muy altas y, creyendo que iba a morir, confesó al sacerdote Mariano López Rayón su participación en la conjura. Este, violando el sacramento religioso, compartió la información y Tot fue aprehendido por el alcalde marquense, trasladado a la capital y puesto a disposición de las autoridades españolas. Recluido en una celda oscura y con poca ventilación, finalmente falleció.
Una escultura en su honor fue elaborada por Rodolfo Galeotti Torres, en el parque central de Cobán, Alta Verapaz.
Con información del Diccionario Histórico Biográfico de Guatemala.
Revista Viernes
La literatura y la gastronomía
La cocina guatemalteca está llena de sabor, textura y color. Recetas que han pasado de generación en generación, en familias que cuidan que cada ingrediente sea colocado como debe ser.
Personas e instituciones se han dado a la tarea de preservar esta parte importante del patrimonio culinario nacional, como por ejemplo El libro de la ruta gastronómica.
“Durante varios meses, el equipo de investigación del Ministerio de Cultura y Deportes documentó y registró las recetas para resguardar y reconocer los exquisitos sabores de nuestros variados platillos, que se han transmitido con lealtad y compromiso a nuestra cultura y raíces. Este libro tiene información interactiva con códigos QR que permitirán al lector encontrar videos didácticos que muestran las cocinas guatemaltecas y detallan los ingredientes propios de la cultura mesoamericana”, se lee en el sitio www.sicultura.gob.gt/ruta-gastronomica/ en el que se puede consultar el documento de manera gratuita.
También la casa editora de la Tipografía Nacional ha publicado recientemente cuatro tomos dedicados a la gastronomía: La cocina de la abue…, a 65 quetzales; Cocina centroamericana, a 50; El ABC de la repostería, a 65 y Nutrición y arte culinario, a 65. Todos de la autora Aurora Sierra Franco.