Dany Marroquín, David Cruz, Kike López y Selvyn Mejicanos son Impronunciables, el grupo que esta semana se encargará de llevar la improvisación teatral hecha en Guatemala a territorio colombiano. Durante el Festival Cundimpro, estos comediantes ofrecerán seis funciones y se codearán con compañías latinoamericanas. Antes de sus presentaciones, que arrancan mañana, su director ofreció más detalles al Diario de Centro América.

Participación

Selvyn Mejicanos, director de Impronunciables, comenta que ser parte del Cundimpro refleja el interés internacional por la improvisación guatemalteca. Hace tres años y medio, los organizadores de la actividad que se celebra en Bogotá descubrieron el trabajo de este cuarteto y en 2017 les extendieron una primera invitación que, por razones de agenda, no pudieron concretar.

Durante su estadía, el conjunto tiene previstas seis funciones, entre ellas la pieza Sin ella y el show Reencarnación. También participarán en la Competencia de Improvisaciones en Formato Deportivo, en la que se medirán con agrupaciones de México, Brasil, Colombia y Perú. “Es una especie de campeonato de un día, en el que se determina quienes son los ganadores del festival”, explica Mejicanos.

Preparación

Para su participación, estos comediantes no ensayan, dice Mejicanos, se “entrenan”. Estas sesiones consisten en ejercitar la mente y el cuerpo, como una forma de estar listos para desarrollar juegos teatrales. “Desde hace un año nos reunimos dos veces por semana, y estar en cartelera en la obra Sin ella nos da una ventaja”, apunta.

Para el director, la improvisación requiere más que dinamismo, pues es una técnica teatral que se trabaja en todo el mundo. Señala que manejar la creatividad, la imaginación, el juego, el error y el storytelling son necesarios en este arte. Además, recuerda que estos ejercicios bien podrían ayudar a una persona tímida a ser más segura o conseguir que alguien extrovertido sepa controlarse mejor.

Formatos

El trabajo de Impronunciables se divide en juegos cortos, en los cuales una palabra, lugar, emoción u objeto sirven de inspiración. Pero también tienen formatos extendidos, enfocados en discursos y temáticas específicas.  Por ejemplo, Sin ella, su más reciente creación, muestra como el grupo, que no cuenta con una integrante femenina, debe ingeniárselas para compensar a la persona faltante.

Stephany López