Bajo un escenario de que el Producto Interno Bruto (PIB) crezca entre 3 y 4 por ciento en 2018, la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) prevé recaudar Q62 mil 485.9 millones, que equivale a un incremento del 8.6 por ciento respecto de lo programado para este año.
Francisco Solórzano Foppa, jefe de la SAT, durante la presentación del modelo macroeconómico y fiscal para elaborar el Presupuesto Multianual 2018-2022 indicó que la mayoría de los ingresos provendría del cumplimiento voluntario en el pago de los impuestos y la reducción en la brecha del contrabando y la defraudación aduanera, con lo que la carga tributaria alcanzaría el 10.5 por ciento.
Limitantes
Enrique Maldonado, analista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, opinó que el Fisco debe ser más ambicioso en la meta de recaudación, porque para el período 2018-2022 solo proyecta elevar en 1 punto porcentual la carga, lo que sería insuficiente para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible y reducir la desnutrición infantil.
“Se ha hecho un esfuerzo de modelar la carga sin ningún cambio en la legislación hacia 5 años plazo, considerando las rigideces en los precios de los gravámenes específicos, que están fijados en una tasa nominal en quetzales desde hace no menos de 15 años”, explicó Julio Héctor Estrada, titular del Ministerio de Finanzas.
Por otro lado, Óscar Monterroso, gerente general del Banco de Guatemala, expresó que las principales variables macroeconómicas registrarán tasas positivas de entre 4 y 10 por ciento.