COLUMNAS
La capa de ozono y otros desafíos medioambientales
Por: David Elustondo, Profesor Titular del departamento de Química de la Universidad de Navarra
El pasado 16 de septiembre, se celebró el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono. En contraposición al situado en la parte baja de la atmósfera (ozono troposférico) -un peligroso contaminante del que oímos hablar cada vez que una gran ciudad tiene problemas de contaminación-, el ozono situado en la estratosfera (entre los 16 y 50 kilómetros de altura) resulta de capital importancia para el desarrollo de la vida en el planeta. De hecho, a pesar de que todo el ozono de la estratosfera tendría el tamaño de una capa de unos pocos milímetros de grosor, su concentración es capaz de eliminar el 99% de la radiación ultravioleta proveniente del sol, funcionando a modo de escudo protector.
Aunque desde mediados de los setenta se tenía conocimiento del efecto de ciertas sustancias sobre el ozono estratosférico, el afamado agujero en la capa no se descubrió hasta 1985, cuando investigadores británicos detectaron una gran disminución de su concentración alrededor del Polo Sur.
Se supo entonces que unas sustancias utilizadas abundantemente en la industria, los compuestos clorofluorocarbonados (CFC), eran los principales causantes de su deterioro. En realidad, estos compuestos -presentes en frigoríficos, aparatos de aire acondicionado o propelentes (gases presentes en los aerosoles)- se consideraban moléculas casi perfectas por su supuesta condición de inertes, lo cual impedía que pudiesen reaccionar con otros elementos químicos. Sin embargo, esa virtud resultó ser su mayor inconveniente, ya que su baja reactividad facilita que permanezcan en la atmósfera durante décadas y lleguen a la estratosfera. Allí, por acción de la radiación ultravioleta, liberan cloro y bromo y desencadenan el proceso de destrucción de ozono. Debido a las características especiales del proceso -que hacen que el agujero se genere sobre todo en las zonas polares (todos los años en el Polo Sur al coincidir con la primavera austral y, en años especialmente fríos, también en el Polo Norte)- la reducción de la capa es constante a nivel global.
Esto genera consecuencias de sobra conocidas (daños en el sistema inmunológico, incremento incesante de los casos de cáncer de piel…) y un aumento exponencial de la preocupación de la población y las autoridades en todo el mundo que desembocó en el Protocolo de Montreal. En virtud de su firma, se prohibió el uso de CFC y otros compuestos dañinos para la capa de ozono. Además,fue el primer acuerdo ambiental multilateral que ha logrado la participación de todos los países, constituyéndose en ejemplo de colaboración internacional intensa y leal para solucionar un problema global.
El Protocolo de Montreal se firmó en 1987, solo dos años después de destaparse el problema. Hoy, treinta años después de su entrada en vigor, los resultados son palpables. De hecho, este año un estudio de la NASA ha obtenido por primera vez pruebas directas de la existencia de una reducción significativa en los niveles de CFC y, por ende, también de una disminución del deterioro de la capa de ozono. Esto ha coincidido con la información de que, en 2017, el agujero alcanzó la extensión más pequeña desde 1988. De no haber sido por el Protocolo de Montreal, el daño sería un 40% mayor.
A pesar de las noticias positivas y de la indiscutible mejoría del agujero antártico, la realidad es que se sigue produciendo una disminución de la capa de ozono a nivel global y esta ya no se encuentra ligada a la concentración de CFC, sino al cambio climático. Esta constatación confirma que su recuperación total -al igual que un gran número de problemas ambientales-, deberá ir de la mano de la mitigación del cambio climático: uno de los mayores desafíos políticos, económicos y sociales a los que la humanidad se ha enfrentado.
En una conferencia reciente en la Universidad de Navarra, a cargo del profesor Mario Molina (ganador del Premio Nobel por su investigación sobre la destrucción del ozono estratosférico), este experto estimó la solución del cambio climático en tan solo 1% o 2% del PIB mundial, y citó al Protocolo de Montreal, precisamente, como el ejemplo a seguir.
Por el momento, los gobiernos parecen seguir arrastrando los pies a la hora de abordar los enormes desafíos del cambio climático. Deberá ser de nuevo la sociedad la que les empuje a tomar las medidas necesarias, para preservar el futuro de las próximas generaciones. En ello se nos va el futuro.
Rodolfo Zelada
Periodista
El mensaje está enviado y la tarea es clara. La población anhela la reconstrucción del Poder Judicial. Los guatemaltecos demandan la aplicación real de la justicia y no vivir en un país donde se criminaliza a quien alza la voz reclamando sus derechos o los de las mayorías, donde se pueda señalar a corruptos y corruptores, donde se hagan investigaciones profesionales.
Ese, pienso, es el gran reto que tienen a sus espaldas los nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ). Deben atender las demandas de la población y construir los cimientos de un sistema que trabaje en favor de un sistema imparcial e independiente.
El balón está en la cancha del Organismo Judicial y los magistrados decidirán si quieren hacer un gol o meterla en su propia portería.
Y es que la captura del exdirector del Registro de Ciudadanos del Tribunal Supremo Electoral, Ramiro Muñoz, en la víspera de asumir como Magistrado de la Corte de Apelaciones, debe interpretarse como un coletazo de los poderes oscuros que se resisten a perder sus cuotas de poder y que están dispuestos a todo, que se han caracterizado por retorcer las leyes a su sabor y antojo con el único propósito de mantener sus privilegios.
En ese sentido, el comentario planteado ayer por el Secretario de Comunicación Social de la Presidencia, Santiago Palomo, no pudo ser más oportuno. El funcionario invitó a los magistrados a reflexionar sobre el sistema judicial que pueda plantear la nueva CSJ. “¿Quieren vivir bajo este mismo yugo de la amenaza, de la coacción y la criminalización o por su parte responder al clamor del pueblo de Guatemala y reconstruir los cimientos de un sistema de justicia que trabaje a favor de la justicia y la independencia?”.
Durante su intervención, el funcionario dejó claro que el Gobierno coordinará acciones con actores comprometidos con la democracia y que no entorpezcan la justicia, incluido el mismo Organismo Judicial, esto al referirse también al llamado que hiciera el magistrado Carlos Lucero, quien funge como presidente interino del nuevo Poder Judicial, quien invitó la administración gubernamental a limar asperezas con el Ministerio Público.
Ante ello, Palomo destacó: “El Gobierno ha sido muy claro que va a trabajar con todos los actores que estén comprometidos con la justicia y con la lucha contra la corrupción.
La postura oficial es concreta y coherente con las demandas de la población, de organizaciones sociales y de la comunidad internacional, sedientos todos de cambios sustanciales que permitan vivir en armonía gozando plenamente de los derechos contemplados en la Constitución Política de la República y el sistema judicial. El balón está en la cancha del Organismo Judicial y los magistrados decidirán si quieren hacer un gol o meterla en su propia portería.
COLUMNAS
Función pública; presupuesto y economía del Infom
Miguel Retolaza
Como entidad autónoma, el Instituto de Fomento Municipal (Infom), pilar fundamental para el desarrollo económico de los municipios en Guatemala, encuentra desde su génesis, promover el progreso de las municipalidades a través de la asistencia técnica, administrativa y financiera. A lo largo de su historia, el Infom ha trabajado de la mano con los gobiernos locales para mejorar la prestación de servicios públicos y facilitar la implementación de proyectos que beneficien a las comunidades.
Teniendo como máxima constitucional el ejercicio de la función pública, dicho Instituto por medio de su estructura organizacional encuentra en su nivel de gobernanza, de conducción técnica y actuación operativa, la búsqueda permanente de la correcta y eficiente ejecución de su presupuesto, tanto de funcionamiento como de inversión; entendiendo este último como la inversión de su patrimonio mediante el otorgamiento de préstamos a los gobiernos municipales.
A lo largo de la historia el Infom ha trabajado de la mano con los gobiernos locales.
Cumpliendo la función pública asignada y ejecutando su presupuesto, podemos valorar los beneficios macroeconómicos que de estos préstamos se derivan, ya que los mismos se catalogan como inversiones a nivel municipal y se transforman en distintos rubros que coadyuvan al progreso y al desarrollo. Por citar ejemplos, la infraestructura básica mejora no solo la salud pública, sino también la eficiencia de la actividad económica, atrayendo inversiones y generando empleo.
Con mejores servicios de agua y saneamiento, la productividad laboral aumenta. Además, la construcción y mantenimiento de infraestructuras crean empleos locales y promueven el crecimiento de las economías regionales; por lo que, Infom, al facilitar estos proyectos, por medio del cumplimiento de su función pública, contribuye directamente a reducir las disparidades económicas entre municipios y a promover un crecimiento más equilibrado y sostenible a nivel nacional.
En cuanto a la asistencia administrativa, asignación para el Infom aún en progreso, se busca propiciar un apoyo para la mejora continua de aspectos de contabilidad municipal y gestión transparente de los fondos públicos.
Esta asistencia, puede incluir la simplificación de operaciones relacionadas con la recaudación, inversión y control de bienes municipales, además de ofrecer apoyo en la depuración de inventarios y verificación de existencias. Con esta asistencia, las municipalidades logran fortalecer su gobernabilidad y mejorar la rendición de cuentas ante sus comunidades.
Integrando lo expuesto, es importante citar que el Índice de Competitividad Local (ICL), promovido por Fundesa, es una herramienta que evalúa la competitividad a nivel subnacional, permitiendo a las municipalidades identificar brechas en 12 pilares clave que contribuyen a la productividad, tales como la infraestructura, la salud, la fuerza laboral, el sistema financiero, entre otros. Estos factores, son esenciales para crear las condiciones necesarias para incrementar la productividad y el desarrollo económico.
Es allí, donde el Infom de hoy, en proceso de reestructuración integral, no ha dejado de ser una entidad importante para el desarrollo de Guatemala. Su compromiso con la transparencia y la eficiencia, contribuye significativamente a la modernización de los gobiernos locales y al bienestar de las comunidades, promoviendo un desarrollo sostenible que beneficia tanto a las generaciones presentes como futuras. Para ello, el cumplimiento de la Función Pública y la ejecución de su presupuesto, son factores determinantes, entre otros, para el desarrollo económico de Guatemala.
M.Sc. Elisabeth Avalos
Gerente de INAP
La Ley Orgánica del Instituto Nacional de Administración Pública -INAP- Decreto número 25-80 del Congreso de la República, artículo 14, crea el Sistema Nacional de Formación y Capacitación el cual queda obligado a integrar las actividades de formación especializada y capacitación de los servidores públicos que actualmente se ejecutan y las que se dispongan en el futuro, para el efecto, establecerá, reglamentará y coordinará el sistema de formación y capacitación del Sector Público.
Aunque el Sistema Nacional de Formación y Capacitación -Sinafoc- es un sistema implementado en el INAP desde su creación, en los últimos años fue suprimido. Hoy, en el marco de la revisión de las funciones básicas del Instituto, hemos retomado este espacio fundamental para el cumplimiento de nuestra misión: la formación de los empleados públicos.
El Sinafoc contribuirá al fortalecimiento de la gestión institucional a través de la formación y capacitación.
Coincide además, con la creación de la Comisión de Modernización del Organismo Ejecutivo, en tanto uno de los ejes transversales de esta modernización es la investigación y la formación que nos corresponde como entidad rectora de la formación de los funcionarios públicos.
El Sinafoc contribuirá al fortalecimiento de la gestión institucional a través de la formación y capacitación para que las instituciones públicas mejoren sus capacidades en la resolución de sus problemas funcionales, generando mayor nivel de valor público institucional.
Además, impulsará permanentemente el desarrollo administrativo de las instituciones públicas; busca fortalecer las competencias del recurso humano del sector público orientado a la mejora de la gestión institucional; y promover el fortalecimiento de la gestión institucional para que las instituciones alcancen el desarrollo administrativo.
Es decir, con el Sinafoc nos encaminamos a participar abiertamente en el proceso de modernización del Organismo Ejecutivo utilizando nuestro marco legal como base para ello y en ese sentido, anunciamos su lanzamiento para este 24 de octubre en nuestra sede. Preparamos también el Congreso Nacional de Administración Pública: Modernización de la Administración Pública en el Organismo Ejecutivo, del cual les daré más información en la próxima columna. Estamos avanzado en la investigación y desarrollo de nuestras capacidades para construir valor público.