Las clases presenciales en el país fueron suspendidas por las autoridades gubernamentales, desde hace más de un año, en todos los centros de enseñanza, como medida de prevención a causa del ingreso del coronavirus en Guatemala.
Desde entonces, la crisis causada por la emergencia sanitaria también se ha convertido en una oportunidad para innovar la impartición del pan del saber, un proceso al cual ya se han adaptado los maestros y estudiantes, acostumbrados a recibir clases en las aulas.
La implementación del uso de la tecnología fue uno de los pasos que debió darse, para evitar contacto entre los docentes y los alumnos, y así evitar contagios masivos de la enfermedad.
A pesar de todas las restricciones ordenadas por el Gobierno de la República para evitar la propagación del Covid-19, la impartición de clases, la entrega de material didáctico y todos los programas de apoyo se han mantenido, y se ha aprovechado la ausencia de profesores y estudiantes en las escuelas para hacer mejoras en los edificios.
Como otro paso para continuar con la innovación de la enseñanza en el país, el Ministerio de Educación (Mineduc) anunció que se impulsarán aulas virtuales en 3 mil centros educativos en todo el territorio nacional, a fin de que el aprendizaje sea dinámico y cuente con mejores herramientas.
Lo anterior es resultado de los análisis efectuados por las autoridades del ramo en la infraestructura escolar durante el tiempo de pandemia, lo cual ha permitido hacer preparativos y modificaciones en los planteles educativos.
Cuando sea posible el retorno a los salones, estos dispondrán de tabletas inteligentes, proyectores y dispositivos con información educativa, todo lo cual dinamizará la docencia.
Dichas herramientas tecnológicas permitirán facilitar a los maestros elaborar su planificación, hacer cápsulas interculturales, audios y videos. La tecnología mejorará los procesos en el sistema de enseñanza, lo que redundará en una mejor formación y preparación de los alumnos.
