Con más de 80 años al servicio de la población, el Laboratorio Nacional de Salud (LNS) es un referente, con reconocimiento nacional e internacional, que presta servicios de análisis la implementación de normas que permitan garantizar la inocuidad de los alimentos, y que todos aquellos productos que entran al mercado guatemalteco cumplan con las normas en beneficio de la salud pública, la sanidad agropecuaria y el medio ambiente.
Ellos integran la primera línea de defensa en la salud del consumidor, con programas para el monitoreo del agua, productos alimenticios y farmacéuticos, tanto de producción nacional como de importación.
Rodeados de un ambiente esterilizado, los técnicos del LNS cuentan con el equipo de alta tecnología para realizar las pruebas en los productos que son de uso diario en nuestras vidas, de modo que cuando ingerimos agua embotellada, una muestra de esa agua ha pasado por las manos de los técnicos para garantizar su pureza.
Medicamentos, alimentos y hasta bebidas gaseosas y jugos de frutas pasan por el análisis minucioso de estos profesionales, que verifican que la fabricación cumple con las normas sanitarias de elaboración antes de llegar al mercado para el consumo humano.