Paco Sánchez Periodista y profesor titular de la Universidade da Coruña
@pacosanchez
Pasa lo mismo con referencias históricas o con noticias del día. Pregunto si sabían aquello. Responden
que no y se extrañan. Miran en Google y se escandalizan: hay tantísimos miles de puestos de trabajo sin cubrir en España… Dicen que no puede ser.
Uno que provenía de la América española y escribe mejor en inglés que en castellano me contó que en su país las iglesias católicas tienen cárceles y calabozos en los sótanos. Me reí, pero él siguió tan serio. No lo decía de broma.
Tampoco pretendía elaborar una imagen o un juego de palabras. Me asusté un poco. Le pregunté si había visitado alguna.
El punto de partida básico de cualquier comunicación: qué sabe el otro y qué ignora.
Dijo que no, pero que le constaba que existían. Le dije que quizá en algún fuerte español el calabozo coincidía debajo de la capilla…El chaval ni estaba ideologizado ni cabía considerarlo obtuso. Era un desheredado, como diría François-Xavier Bellamy, alguien a quien no entregaron la herencia cultural que le pertenecía y, al robársela, le privaron de un capital enorme. La culpa no es suya.
Digo todo esto porque cada vez me cuesta más saber lo que saben, que es el punto de partida básico de cualquier comunicación: qué sabe el otro y qué ignora. Lo primero resulta imprescindible para no aburrir y lo segundo para hacerse entender. Un día arriesgué con un chaval que no habla y rara vez sonríe: “Pareces salido de un manga”. Es flacucho y llevaba el flequillo sobre los ojos.
Le gustó y contestó rápido, como si ya lo hubiera pensado antes: “Y tú hoy vas vestido como Flanders. Él también es muy católico”. Fui a ver: no sabía que era un personaje de Los Simpson. Y efectivamente, aquel día yo llevaba un pantalón beis y un jersey verde. Eso sí, Ned Flanders es muy evangélico, pero nada católico.