Comunícate con nosotros al 1590

COLUMNAS

Espiral inflacionaria y su impacto en la energía eléctrica

Publicado

-

Ángel jesús García 
Director Comisión Nacional de Energía Eléctrica
[email protected]

Luego de la caída de la Unión Soviética en 1991, el mundo, en especial Europa, vio con ilusión un futuro próspero y libre de guerras.  La realidad fue diferente, más en los años 2001, 2008 y con más crudeza en la guerra actual que se libra en territorio europeo. Se entró en una espiral inflacionaria de la que en este momento no se observa salida en el corto plazo sino una tendencia a mantenerse y hasta incrementarse, afectando al alza los componentes del costo de la energía eléctrica en nuestro país. Esta situación es producto de una guerra que, a pesar de lo militar, es principalmente económica siendo la disponibilidad energética de una de las partes en conflicto lo que se está usando como arma contra la otra parte, resultando que el precio de la energía (gas, carbón, petróleo) es el que mayor incremento y volatilidad presenta.

Para Guatemala y para otros países, el impacto se manifiesta en precios de la electricidad al alza. Veamos la cadena de valor del mercado mayorista:  los costos de producción de energía eléctrica en nuestro país han establecido y logrado una matriz de generación renovable en gran parte (entre 60 por ciento y 70 por ciento según sea el invierno), siendo la diferencia producida con combustibles fósiles importados como carbón, así como importando energía producida con gas natural, por lo que el incremento en el costo de esos insumos afecta directamente el precio de la energía generada. El costo del combustible no es el único afectado por la inflación.

El costo del combustible no es el único afectado por la inflación.

Existen costos adicionales de operación y mantenimiento de la central que se afectan por la inflación internacional (repuestos y lubricantes) o por la inflación local (adquisiciones y contratos locales). Para Guatemala, a diferencia de otros países, no existen costos por servicio de la deuda dedicada a la infraestructura eléctrica y la inversión en generación no es del Estado. Las centrales renovables también se ven afectadas por la inflación ya que impacta en el costo de los insumos importados como en los insumos locales.

Producir energía eléctrica necesita inversión, la cual debe recuperarse y debe contemplar el impacto de la inflación, ya sea como un factor de ajuste explícito en el precio de la potencia o como un factor de riesgo que incrementa ese precio de acuerdo al criterio del inversionista y que no se muestra como parte de la fórmula. En Guatemala está próxima a lanzarse una nueva licitación para la instalación de generación nueva (especialmente renovable) y aunque hoy no se conocen los precios que serán ofertados, no cabe duda de que serán impactados.

Algo similar ocurre con los costos de operación y mantenimiento de las redes de transporte y de distribución con el factor adicional que la remuneración de los costos de inversión de estas redes se ajusta periódicamente (en forma bianual para el transporte y quinquenal para la distribución) en función de los costos de una red eficiente y económicamente adaptada para asegurar que la calidad del servicio provista se mantenga en las condiciones de calidad que define el marco legal. Periódicamente, los costos de la red se ajustan a los costos reales de las tecnologías eficientes utilizadas por la industria que muy probablemente también se manifestarán al alza.

Las oportunidades para el país en medio de esta situación están en impulsar la independencia energética y en legislar para disminuir el impacto de la tasa municipal de alumbrado en favor de pequeños consumidores. Quienes tienen la capacidad de hacerlo, deben invertir en reducir su consumo energético; por ejemplo, instalando paneles solares, y en el caso de los grandes usuarios, limitando sus riesgos en costos de suministro por medio de contratos en el mercado a término, recordando que los precios altos son una señal de escasez.

Colaborador DCA
Seguir leyendo

COLUMNAS

Respeto a los paganos

Publicado

-

Leonel Guerra Saravia
[email protected]

Hace muchos años no existían el Papamóvil ni el Vaticano, pero el humano siempre investigaba para justificar su existencia. Existía mucho paganismo, alguno por no investigar y otros para justificar.

Paganismo nórdico o paganismo escandinavo (en nórdico antiguo: heidindómr) es un término utilizado para describir las tradiciones religiosas comunes entre las tribus germánicas que habitaban en los países nórdicos antes y durante la cristianización de Europa del norte.

El paganismo nórdico es un subconjunto del paganismo germánico, practicado en las tierras habitadas por las tribus germánicas en casi toda Europa central y septentrional, durante la época vikinga.

Diversas ciencias humanas se han interesado por el fenómeno religioso.

El conocimiento actual sobre el paganismo nórdico ha sido inferido por los resultados arqueológicos, etimológicos, y por los materiales escritos de la época. Algunos expertos como Georges Dumézil, sugieren que diversos elementos estructurales y temáticos dentro de las certificadas ideas religiosas escandinavas, ubican al paganismo escandinavo, dentro de la estructura básica de la expresión pan-indoeuropea de las ideas espirituales como un todo.

La religión escandinava es un fenómeno cultural, y, como la mayoría de las creencias folclóricas anteriores a la alfabetización, sus practicantes, probablemente, no tenían un nombre para su religión, hasta que entraron en contacto con forasteros o competidores.

Los vikingos consideraban que los diversos seres sobrenaturales en los que creían, no solo dioses sino también elfos, gigantes y otros muchos, habitaban mundos que los humanos no percibían y con los que raramente podían interactuar, pero cuyos destinos estaban ligados al suyo. Más allá de la fe: existen entre las principales religiones del mundo: cristianismo. Judaísmo.

Hinduismo. Budismo. Islam. Religión suele definirse como un sistema cultural de determinados comportamientos, prácticas, cosmovisiones, éticas, morales, textos, lugares sagrados, profecías u organizaciones que relacionan la humanidad a elementos sobrenaturales, trascendentales, místicos o espirituales. Es decir, el método de otras ciencias enriquece el debate religioso.

Diversas ciencias humanas se han interesado por el fenómeno religioso desde sus respectivos puntos de vista como por ejemplo la antropología, la sociología, la psicología y la historia de las religiones. Por otro lado, disciplinas como la fenomenología de la religión estudian específicamente sus manifestaciones intentando dar con una definición exhaustiva del fenómeno y mostrar su relación con la índole propia del ser humano.

En secciones subsecuentes se desarrollan más elementos para el análisis de la religión. No olvidemos que el humano seguirá investigando.

Colaborador DCA
Seguir leyendo

COLUMNAS

Tejiendo la red del progreso en Guatemala

Publicado

-

M.A. Pamela Sandoval Polanco

Dirección de Gobierno Electrónico -GAE-pamela.sandoval
@transparencia.gob.gt

A lo largo de la historia, la tecnología ha sido el hilo conductor de una evolución constante. Desde las rudimentarias herramientas de piedra hasta los sofisticados dispositivos inteligentes de hoy, cada avance tecnológico ha marcado un nuevo capítulo en nuestra relación con el entorno.

La era manual, con su inherente necesidad del contacto humano, dio paso a la era electrónica, una época definida por máquinas activadas con solo presionar botones y mover palancas.

Ahora, nos encontramos inmersos en la era digital, un tiempo donde la información binaria permea todos los aspectos de nuestra vida cotidiana, redefiniendo nuestra existencia en este moderno universo de datos.

Esta revolución digital ha transformado no solo las herramientas que utilizamos, sino también nuestras estructuras sociales, económicas y culturales, instaurando un nuevo paradigma donde la adaptabilidad y la innovación son esenciales para el progreso individual y colectivo.

Estas herramientas digitales, ahora esenciales en nuestra vida diaria, se incorporan considerablemente en el ámbito laboral, educativo y recreativo, por mencionar algunos, logrando que más personas puedan acceder, aprender e interactuar desde cualquier lugar y a su propio ritmo.

La Agenda Digital va más allá de alcanzar objetivos; es una visión de progreso y accesibilidad compartida por todos.

En el ámbito de la administración pública, implica la reestructuración y modernización de los servicios gubernamentales para mejorar la eficiencia, la transparencia y la participación ciudadana. Va más allá de adoptar nuevas tecnologías, implicando una transformación de procesos y cultura organizativa.

Enfrenta retos clave para mantener su relevancia y proteger los derechos de los ciudadanos. Por tanto, en un mundo cada vez más dependiente de la tecnología, algunos disfrutan de las ventajas de la era digital, otros quedan rezagados, limitando su acceso a oportunidades educativas, económicas y sociales.

Frente a este desafío, las agendas digitales de gobierno emergen como planes estratégicos para cerrar esta brecha y fomentar una participación equitativa en la sociedad digital.

En Guatemala, la reciente promoción de la Agenda de Gobierno Digital es un paso adelante en la transformación digital y el uso de las TIC en la sociedad, buscando mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y promover el desarrollo económico. Se consideran aspectos clave como la identidad digital, la interoperabilidad, la ciberseguridad y los pagos digitales.

La identidad digital es un pilar en la modernización y transformación, permitiendo a los ciudadanos realizar transacciones financieras, comerciales, contractuales y legales sin restricciones geográficas.

La interoperabilidad es crucial, ya que mejora la prestación de servicios y la experiencia ciudadana, impulsando el comercio electrónico. La ciberseguridad es vital para la protección digital de personas individuales y jurídicas. Para el avance de la agenda digital, la colaboración entre sectores de la sociedad  es esencial. 

Esta cooperación debe enfocarse en crear oportunidades y acceso inclusivo a servicios públicos innovadores, asegurando interacciones efectivas y legalmente protegidas, y transacciones internas y externas seguras y transparentes.

El esfuerzo conjunto de todos los participantes en la modernización de la administración pública es digno de elogio. El objetivo es facilitar que cada ciudadano obtenga la información y los recursos que requiere de manera sencilla y rápida.

Cada iniciativa digital y cada servicio que se transforma al entorno digital son pasos fundamentales hacia una sociedad más interconectada, ágil y trasparente. La Agenda Digital va más allá de alcanzar objetivos; es una visión de desarrollo y accesibilidad compartida por todos.

Este esfuerzo colectivo nos impulsa hacia un futuro innovador, invitándonos a ser arquitectos activos de un legado digital duradero y a asegurar que la tecnología sea un pilar de progreso, igualdad y bienestar para cada guatemalteco.

Colaborador DCA
Seguir leyendo

COLUMNAS

Hubs para la ciudad (II)

Publicado

-

Pablo Allard Serrano

Facultad de Arquitectura y Arte

Estos espacios no solo ofrecen oportunidades económicas y desarrollo comunitario, sino que también juegan un papel significativo en la percepción de seguridad de un espacio urbano determinado, lugares que adquieren una sensación de cuidado que por lo general supera los límites del terreno, ampliando su rango de acción alrededor de barrios y ciudadanos que comienzan a relacionarse con estos Hubs.

En Santiago existen varios Hubs urbanos impulsados por instituciones públicas: HUB Providencia, La Fábrica en Renca, La Paz 482 en Independencia, HUB Vitacura, Corporación Yunus en Peñalolén, por nombrar algunos.

En Santiago existen varios Hubs urbanos.

Estos han generado externalidades positivas a través del emprendimiento, la cultura, la innovación, la acción social y la exploración tecnológica.

Los espacios públicos y las infraestructuras públicas que se abren al barrio hacen más seguros, atractivos y activos estos espacios, se fomenta la participación comunitaria y se disuade la actividad delictual. Además, la presencia de Hubs en áreas previamente descuidadas puede actuar como un catalizador para la inversión y el desarrollo, instalando nuevos servicios, creando comercio y nuevos espacios públicos.

Tal es el caso de la Fábrica de Renca, que recuperó un supermercado abandonado y al poco tiempo floreció el comercio a su alrededor.

Al ofrecer oportunidades económicas, fomentar la innovación en seguridad y transformar el entorno urbano, estos centros además ofrecen oportunidades para el desarrollo local y pueden contribuir a crear ciudades más seguras y prósperas para todos sus habitantes.

Colaborador DCA
Seguir leyendo

Directorio

  • Dirección General: Carlos Morales Monzón
  • Coordinación General de Redacción: Miguel González Moraga
  • Coordinación de Información: Mario Antonio Ramos
  • Editores: Carlos Ajanel Soberanis, Jose Pelico, Erick Campos, Katheryn Ibarra y Max Pérez
  • Página Web: Isabel Juárez

más temas

©2024 Diario de Centro América - Todos los derechos reservados.