Netflix se dio a la tarea, con Marriage Story, de articular la complejidad emocional del divorcio. El drama protagonizado por Adam Driver y Scarlett Johansson retrató el tortuoso calvario del fin de una relación. Ahora, HBO, da su visión del divorcio con los actores Oscar Isaac y Jessica Chastain en Scenes from a Marriage, recién estrenada por la cadena. La serie está basada y actualizada en la serie escrita por el aclamado artista sueco Ingmar Bergman lanzada en 1973 y esta es una actualización de roles.
Si revisamos los antecedentes fílmicos el divorcio no es un tema tan rentable como las comedias románticas. Como sabemos la separación es condenada por la mayoría de religiones conservadoras en el mundo y en la actualidad se convirtió en un tópico derivado de la crisis sanitaria. Hollywood retrató dicho tormento emocional en Kramer vrs Kramer. La película de 1978 protagonizada por Meryl Streep y Dustin Hoffman es uno de los pulsos maritales en los que predomina la destrucción física emocional donde el sistema de justicia es el último árbitro y así protegernos del interminable choque de culpas y reproches.
Otros ejemplos que muestran esa toxicidad son: La Guerra de los Roses (1989) o el retrato sórdido de Blue Valentine (2010) y más recientemente, la ya mencionada y celebrada Marriage Story (2019).
Entonces Scenes From a Marriage es el retrato de un descarrilamiento emocional causado por la coyuntural donde la mujer es la exitosa y proveedora o “mujer alfa” y el hombre es el encargado de las tareas familiares, el mantenimiento del hogar y la crianza de los hijos.
Si revisamos los antecedentes fílmicos el divorcio no es un tema tan rentable como las comedias románticas
La trama gira alrededor de Mira y Jonathan. Mira quiere recuperar esa pasión que alguna vez sintió cuando conoció a Jonathan y Jonathan no se da cuenta de que su matrimonio está estrellado en las piedras. En ese vaivén se desata el rosario de reproches que desemboca en una confesión de infidelidad. La serie posee un lenguaje cinematográfico de secuencias largas y contemplativas con diálogos espesos donde se dice una cosa mientras se siente otra. Esto con el fin de reflejar un realismo enervante de discusiones interminables que ocurren en altas horas de la noche.
Scenes from a Marriage es un profundo cuestionamiento sobre el escenario de las relaciones actuales, que por el encierro, fueron golpeadas por la cotidianidad y el aburrimiento. Sin tener la intención de amedrentar la idea de una relación, somos testigos del difícil tránsito de una pareja que busca encontrar paz, cada quien por su lado para darle un sentido más optimista al final divorcio, reducir el trauma a los hijos y estar conforme con las nuevas elecciones de vida, esto a pesar que cada objeto, foto, prenda de vestir, es un ataque a la nostalgia.
Escenas de un matrimonio no es una serie para gente con estómago débil. Es un tránsito agónico que busca encontrar piezas entre el polvo y la basura para ver si todavía encajan a pesar del dolor causado, la náusea de la culpa y la felicidad que conlleva el perdón y el renacimiento del amor propio.
