El canal de Suez se inauguró en 1869, y es un importante paso marítimo que se ubica en Egipto y en el mar Mediterráneo con el mar Rojo.
Aproximadamente dos millones de barriles de petróleo y un buen porcentaje de gas natural pasan por el canal cada día. El bloqueo del canal de Suez por el carguero Ever Green, que mide 400 metros de largo y pesa alrededor de 200 mil toneladas, lo hace ser uno de los cargueros más grandes del mundo. Fue un bloqueo que afectó a la industria naviera a nivel mundial y también a la economía egipcia, pero también se vieron afectadas muchas empresas de la cadena de suministro desde minoristas, supermercados y fabricantes.
Tras casi una semana de esfuerzos e incertidumbre, el carguero Ever Green fue finalmente reflotado.
Algunos analistas de la industria marítima estiman que el impacto podrá ser sensible en la saturación de cargueros en otros puertos, lo cual impacta en los precios de los productos. De hecho, con sólo unos días de suspensión del canal de Suez debido al bloqueo, los precios mundiales del crudo subieron a más de un 6 por ciento. En declaraciones pasadas, la autoridad del canal de Suez mencionó que el encallamiento del carguero estaba impactando fuertemente al canal, y le costaba entre 15 millones de dólares por cada día de bloqueo. El efecto podrá ser transitorio, ahora que el canal fue habilitado nuevamente; sin embargo, el “escenario pesadilla” que denominan los analistas tiene que ver con la modernización de la infraestructura de los canales marítimos.
Esto, debido que se construyen cargueros más grandes para aumentar su capacidad de contenedores, pero los canales continúan siendo estrechos, volviendo más difícil la navegación. Estas serían, mencionan los analistas, unas de las implicaciones por tomar en cuenta en el comercio internacional, y sus cadenas de suministro a nivel global. Es decir, somete a presión la cadena de suministro a nivel global, ya que existe una corriente de la fabricación “justo a tiempo”, y a medida que el sistema de comercio se vuelve más interdependiente, se está más sujeto a las vulnerabilidades que sufra la cadena de suministro. No obstante, este bloqueo nos pone nuevamente en la mesa la crisis que existe por falta de contenedores para el transporte de mercancías.
Se conoce que, desde noviembre del año pasado, se incrementaron los costos de envío por contenedores desde Asia hacia otros puertos, lo que implica también un impacto en la economía de los bienes y servicios.
