Entre los planes de seguridad se han creado fuerzas especiales integradas por el Ejército y la Policía Nacional Civil, como la De Tarea Chortí, coordinada por el ministro de Gobernación, según se establece en el Acuerdo Ministerial 226-2015, que se publicó en este diario el 8 de abril de 2015, y que dio lugar a la instalación de esta organización de vigilancia en julio de ese año.
La sede de este ente fue situada en la cabecera de Zacapa, y se le mandó la cobertura de ese departamento, Chiquimula, Izabal, Alta Verapaz y El Progreso, con 300 elementos para patrullar la línea fronteriza, con el fin de combatir hechos ilícitos como el contrabando y narcotráfico, además de ponerle diques al crimen organizado.
Desde ese año, el Ejército de los Estados Unidos ha contribuido a este esfuerzo, y ayer reiteró su apoyo en un acto oficial en el que el Grupo Militar y Sección de Asuntos Antinarcóticos y de Aplicación de la Ley (INL, por sus siglas en inglés) hizo entrega al Gobierno de un lote de vehículos, repuestos e insumos para el uso de la Fuerza de Tarea Chortí.
El presidente Jimmy Morales agradeció el donativo y dijo en su discurso que Guatemala lo está logrando, y “juntos podemos alcanzar cosas verdaderamente maravillosas”, al referirse a los frutos en materia de seguridad y la lucha contra la violencia, que ha sido posible gracias a la participación de todos los responsables de proteger a los guatemaltecos.
En la frontera norte también se cuenta con la Fuerza de Tarea Tecún Umán, que se instaló en 2014, con el mandato de proteger el territorio, especialmente en el departamento de San Marcos, mientras que en la ciudad capital se instauró la denominada Kaminal Juyú.
Estos esfuerzos por brindar mayor y mejor resguardo a la población han dado como resultado la baja en los números que se contabilizan en los registros de la cartera del Interior, sobre hechos criminales y violentos en los primeros seis meses del año.
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