La Asociación La Alianza (ALA) cuenta con programas integrales en favor de las niñas y la adolescencia víctimas de la violencia, trata y el desamparo, también para otros menores que son vulnerables a esos flagelos, a los que se les da acompañamiento profesional en diferentes ámbitos.
De acuerdo con datos de la institución, ALA atiende a no menos de 165 menores que han sido objeto de vejámenes, de los cuales 60 son abrigados de manera permanente.
Además del apoyo psicológico y material que reciben las afectadas, la entidad también se constituye como parte acusadora en los tribunales en los casos de agresión cometidos contra esas personas. De esa cuenta, la organización ha logrado 24 sentencias a la fecha.
“Trabajamos en todas las modalidades del delito, según la Ley Contra la Violencia Sexual, Explotación y Trata de Personas, decreto 9-2009,” afirmó Carolina Escobar Sarti, directora de ALA.
Acompañamiento
Las niñas y adolescentes han encontrado en esta Asociación un hálito de esperanza, pues en ese recinto reciben todo el cariño que les ha negado la familia y la sociedad, ámbitos en los cuales, por ignorancia, son rechazadas por haber sido objeto de uno de esos flagelos.
Para dignificar a estas pequeñas, en el centro se les provee de lo indispensable, como techo, alimento, respeto y amor incondicional.
La Alianza cuenta con cinco programas: Residencial; Reintegración Familiar; Legal; Educación Pública y Sensibilización; y de Estimulación Oportuna, mediante los cuales ofrece atención psicosocial, médica, pediátrica, psiquiátrica, estimulación temprana, apoyo legal, arte, deportes, así como educación formal y vocacional.
“Con el trabajo de prevención buscamos modificar patrones de conducta en familiares y comunidades, para que reconozcan que la violencia y la trata no son normales, sino delitos. De esa manera habrá condiciones más seguras para la reinserción de niños, niñas y adolescentes”, puntualizó Escobar.
“La Asociación trabaja con un estándar internacional de buenas prácticas, en relación con el empoderamiento de los derechos de las infantes para que se visualicen como sobrevivientes de ese flagelo”, expresó Sandra Gularte, jefa de la Defensoría de las Personas Víctimas de Trata de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH).
ALA impulsa sus acciones de la mano con la Policía Nacional Civil, las sociedades educativas, autoridades y redes locales, organizaciones y grupos civiles, especialmente con mujeres.
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