ARTES
Descubra los tesoros del Musac
En ocasión del 25 aniversario de la institución, resaltamos algunos de sus espacios.
Desde su fundación, en 1994, el Museo de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Musac) se ha caracterizado por ser un punto de encuentro entre los guatemaltecos, la ciencia, el arte y la cultura. La institución, ubicada en la 9a. avenida 9-79, zona 1, llega mañana a su primer cuarto de siglo, por lo que la ocasión es ideal para descubrir algunos de los tesoros que resguarda.
1. Arquitectura
Uno tesoro del Musac es su propia sede. El antiguo edificio de la Facultad de Derecho de la Universidad de San Carlos destaca por su estilo neoclásico, de influencia renacentista. A pesar de las restauraciones a las que fue sometido, luego de los terremotos de 1917 y 1918, su belleza arquitectónica aún se aprecia, dice Sonia Alfaro, educadora del museo.
2. El relieve
Una de las reliquias del museo que, según Alfaro, pasa desapercibida en algunas ocasiones, es el relieve alusivo a la justicia y la libertad. Instalada en la parte superior del ingreso, esta pieza escultórica está compuesta por las figuras de Temis y Palas, quienes protegen los valores de la patria, el escudo nacional y un gorro frigio, símbolo de gloria y triunfo.
3. Salón Mayor
El Salón Mayor llama la atención por su artesonado y revestimiento de cedro y caoba, y por resguardar los restos del doctor Mariano Gálvez. Sin embargo, este espacio ha jugado un papel clave en nuestra historia: ahí se firmó, el 1 de julio de 1823, la Independencia Absoluta de Centro América y la Constitución Federal para abolir la esclavitud; y de 1874 a 1957, albergó la Biblioteca Nacional de Guatemala.
4. Tierra fértil
En uno de los costados del Salón Mayor, se encuentra Tierra fértil, una obra creada y donada por la muralista guatemalteca Rina Lazo. La pieza, que originalmente se encontraba en el Club Italiano, representa la belleza del país, desde distintos personajes, como una mujer de piel morena, que evoca la fertilidad; una mujer de piel amarilla, que alude al maíz; y una familia, como símbolo del trabajo y la recolección de la cosecha.
5. Bóvedas
De acuerdo con Alfaro, otro atractivo del Musac es su techo abovedado. Al subir las escalinatas del edificio se aprecian las bóvedas y linternillas, desde las cuales se contemplan gárgolas y parte de los edificios históricos cercanos. A diferencia del resto de espacios, este tesoro puede conocerse solo mediante las visitas guiadas, que coordina el museo. Más información al 2232-0721.
6. Salas de exposiciones
Con la fundación del Musac, las aulas que en su momento recibieron a los estudiantes de la Facultad de Derecho, se transformaron en cinco salas de exposiciones. Algunas de ellas, como la Histórica y la del Edificio, albergan exhibiciones permanentes; mientras que por la Facultativa, la de las Culturas y Galería de Arte pasan muestras temporales.
7. Programa educativo
Con la intención de acercar a los visitantes a las investigaciones que refuerzan las exposiciones, el Musac cuenta con un Programa educativo. Este incluye conferencias, foros, talleres y proyecciones, que se desarrollan en la Sala de clases no. 6 o en algún otro espacio del edificio.
Dato
La institución celebrará su aniversario durante todo el fin de semana. La agenda completa está en Facebook @MuseodelaUsac.
Dato
El Musac puede visitarse de lunes a sábado, de 9:30 a 17:30, excepto martes. La admisión es de Q1.
ARTES
Natti Natasha trae mucha bachata
Natti Natasha, cantante dominicana, estrenó Tu loca, su nueva canción de bachata que la reúne una vez más con el productor Romeo Santos, con quien trabajó Quiéreme menos, lanzado este año.
El video lo dirigió Marlon Peña en el cual la protagonista descubre, contrario a lo que imaginaba, que su pareja le ha sido fiel todo el tiempo. Y es que la artista ha hablado en sus canciones sobre el abuso doméstico, la sexualidad, entre otros temas.
Asimismo, en mayo, la edición de México y América Latina de Architectural Digest dedicó un espacio a la residencia dela intérprete y su pareja, Raphy Pina, en Miami. Por primera vez mostró sus interiores y dio detalles inéditos sobre su vida familiar.
ARTES
Estampa su creación en Sumpango
Briza Olin pintó un mural como homenaje al municipio y los barriletes
La artista originaria de Hidalgo, México, Briza Olin, pintó un mural sobre la avenida de La Alameda y 6ª. calle de la zona 3 de Sumpango, Sacatepéquez, como homenaje a su población y sus barriletes.
“Como respeto a su gente, lengua y papalotes, expresión cultural rica y simbólica que representa la conexión con la historia, la naturaleza y la espiritualidad de los pueblos mayas de Guatemala”, dijo la virtuosa, en referencia a su obra. Agregó que estos son cometas gigantes que se construyen con papel de seda y madera, se decoran con diseños coloridos y simbólicos. También representan la lucha entre el bien y mal, la luz y oscuridad, así como la vida y muerte.
Dato
La página Festival de Sumpango cita que la tradición oral más antigua recogida en San Agustín, los barriletes representan la unión del inframundo con el mundo según los criterios cosmogónicos de los indígenas de la comunidad.
Es la vía de enlace entre los muertos (los santos) y los vivos.
El mural, de acuerdo con Olin, cumple los objetivos del colectivo Somos Muros: preservar sus derechos colectivos de los pueblos originarios, la dignidad y su el bienestar.
ARTES
Viola: “Espero despertar conciencias”
El curador italiano de la próxima Bienal de Arte Paiz llegó a Guatemala y conversó sobre este desafío.
Nacido en Nápoles, Italia, Eugenio Viola ha dedicado su vida al arte, y actualmente es director artístico del Museo de Arte Moderno de Bogotá (Mambo) en Colombia. Su próximo desafío será en Guatemala al ser nombrado curador de la próxima Bienal de Arte Paiz, que se desarrollará en 2025, pero cuyos preparativos han dado inicio.
Su palmarés
Viola cuenta con un doctorado en Métodos y metodologías de investigación arqueológica e histórico-artística, en la Universidad de Salerno, es especialista en las experiencias y teorías relacionadas con el performance y la poética corporal. De 2009 a 2016 fue comisario en El Museo d’Arte Contemporánea Donnaregina (Madre). Además, fue elegido como mejor comisario italiano de 2016 y 2019 por la revista de arte italiana Artribune y ha trabajado en la Bienal de Venecia y países como Alemania, Polonia, Estonia, Francia y Taipéi.
En la siguiente entrevista, comenta de su vida y trabajo.
¿Cómo surge su interés por el arte?
Desde niño básicamente. Culpa de mi papá que no me llevaba a los estadios, sino a los museos. Trabajo en el mundo del arte desde hace 20 años y como curador institucional son 15 años.
¿Qué lo llevó a dar el salto a Latinoamérica?
La vida es un viaje. Vivía en Australia cuando salio la convocatoria del Mambo y (al ganarla)digo ¿ahora qué hago? Pero había trabajado desde hace mucho tiempo con arte latinoamericano. Me encanta su visceralidad; probablemente, el curador de mi generación ha trabajado más artistas latinoamericanos y yo por ejemplo tengo una relación muy larga con Regina José Galindo. La primera vez que trabajé con ella, yo era curador del Museo de Arte Contemporáneo en Nápoles, en 2010. Tengo el honor de hacer su primera revisión ontológica.
¿Fue difícil empezar esta nueva faceta en Colombia?
Claro, pero el desafío me tiene vivo, me encanta, y además la vida, como dije antes, es un viaje. Cuando me mudé a Colombia, no hablaba español, pero lo aprendí.
¿Cómo ve la diferencia entre el arte europeo y el latinoamericano, que lo decanta más por este lado del mundo?
El arte es siempre una cuestión de contexto y contaminación, pero tiene también un gran poder metafórico y metamórfico. Te mencionaba a Regina, ella habla de la violencia, principalmente hacia las mujeres, parte de su contexto específico guatemalteco, pero a través de su trabajo te comunica una reflexión más general sobre la mujer alrededor del mundo y el exceso de violencia en la sociedad contemporánea. Me ha encantado el compromiso de los artistas latinoamericanos, viven urgencias diferentes, que producen un arte comprometido con lo real. Y eso me imagino con esta bienal hablar desde Guatemala al mundo.
¿Cómo ve la función de un curador en una muestra?
Es ser un director de orquesta.
¿Cuál es su expectativa de trabajar en Guatemala?
Había venido antes al país por una investigación en el perfonmance en 2016; mi expectativa es poner preguntas. Si alguien visita una exposición, un proyecto o una bienal y se va con más preguntas que cuando llegó, significa que el experimento funcionó. Yo no tengo que dar respuestas, yo tengo que provocar preguntas. Espero despertar conciencias.
¿Qué opina de la Bienal de Arte Paiz?
Es una institución importante, la segunda en Latinoamérica, y nunca se interrumpió en los años más duros del conflicto armado. El arte crea puentes y no barreras, el mundo cada día es más conectado pero más intolerante; el arte tiene un papel fundamental especialmente en una sociedad con un pasado complicado, y por eso es rico culturalmente, porque los artistas tienen mucho material que procesar y producen propuestas que van mucho más allá de la contingencia para las que fueron
producidas.
¿Tiene alguna opinión del arte en Guatemala?
Guatemala tiene una historia compleja que se refleja en los artistas, 42 por ciento de la población, sino estoy equivocado, es de origen indígena, y entonces tienes muchos artistas indígenas que a través de Guatemala hablan al mundo y que procesan y usan un instrumento de resistencia, sus raíces y un sistema policéntrico; es decir, centrífugo y no centrípeto como lo es generalmente. Están artistas que de sus pueblos hablan al mundo orgullosamente, y eso es único.
¿Qué aconseja a los curadores más jóvenes?
Seguir sus propios sueños y creer en ellos.