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El Manchester City se clasificó ayer para las semifinales de la Liga de Campeones al empatar 1-1 con un buen Bayern Múnich, al que goleó en la ida por 3-0, y se enfrentará al Real Madrid, vigente campeón, en la ronda de los cuatro mejores.
El primer aviso del City llegó en el minuto 55, pero Haaland remató mal. Dos minutos después, se produjo otro contragolpe que se inició con un despeje largo de Stones desde el área.
En la segunda, el noruego no falló. Al llegar al área y regatear a Upamecano, batió a Yann Sommer con un disparo con la zurda antes de que De Ligt pudiera bloquear el disparo.
El estadio volvió a encenderse un poco cuando Joshua Kimmich logró el empate al marcar en el 84 un penal por mano de Akanji que el árbitro pitó luego de ser avisado por el VAR y ver la acción en el monitor.
Regreso entre los mejores
El Inter vuelve a estar entre los grandes, en unas semifinales de Liga de Campeones después de 13 años alejado de ellas. Una hazaña con sabor argentino, gracias a los goles fundamentales de Lautaro y Correa, que certificaron el pase contra el Benfica (3-3, 5-3 resultado global) en un Giuseppe Meazza que albergará la eliminatoria al completo, con un derbi de Milán histórico.
Inzaghi mantuvo la presión alta y les metió la idea a sus jugadores de que todavía quedaba un mundo para llegar a las semis.