Como parte de las políticas de transparencia y rendición de cuentas que impulsa el Organismo Ejecutivo, se conocieron los esfuerzos realizados por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) para fortalecer las capacidades de pequeños campesinos.
Un expediente divulgado por la citada cartera refiere que, de 2020 a la fecha, más de 1.6 millones de agricultores han sido orientados y formados en el aprovechamiento de la tierra, lo que ha permitido diversificar los cultivos e incrementar la comercialización en los ámbitos nacional e internacional.
En resumen, y en estricto apego a la Política de producción y comercialización agrícola sostenible, el apoyo del Gobierno ha estimulado la competitividad agropecuaria, hidrobiológica y del hogar rural. Los resultados de estos esfuerzos empiezan a conocerse y constatarse en la mejora de los ingresos y calidad de vida de las familias que viven de la siembra y cosecha.
Adicionalmente a estos esfuerzos, que han sido prioridad de la administración del presidente Alejandro Giammattei, se fortaleció la competitividad de los sectores agroindustrial, agrícola y pecuario.
Lo anterior, refiere el informe del MAGA, es resultado de la emisión de más de 1.2 millones de documentos, en los que se incluyen licencias, permisos y regencias, con el objetivo de garantizar la sanidad animal y vegetal, así como la importación y exportación de mercancías e insumos para la producción.
Los avances incluyen a líderes de aldeas y municipios y a jóvenes que incursionan en el área. De esa cuenta, 5958 promotores comunitarios y estudiantes de nivel medio, inscritos en carreras vinculadas con el tema, obtuvieron capacitación forestal.
En fin, estamos frente a una estrategia que tuvo como norte generarles mayores oportunidades a los labriegos y apostar por el crecimiento inclusivo de los connacionales.