La inteligencia artificial (IA) es un sistema avanzado que, tal vez, sin darnos cuenta se ha convertido en parte de nuestra vida
cotidiana. Los mapas online, tan útiles cuando precisamos caminos más expeditos, o las famosas Siri, Alexa o Google Assistant, que nos permiten intearactuar con la tecnología, son parte de esta nueva etapa de la civilización que, poco a poco, llena los sentidos y torna nuestra existencia más acogedora. Sencilla. Fácil.
Vista de esta manera, la IA implica grandes avances sociales. Sin embargo, como todo en el mundo, esta tecnología tiene otra cara, un rostro que puede ser terrible si no se previene. De hecho, esta parte de la ciencia representa una de las amenazas más latentes y peligrosas que enfrenta el mundo.
En este punto radica la importancia del Segundo Seminario Internacional de Prospectiva, Inteligencia Artificial y Ciberseguridad: Desafío Global para la Seguridad, que organiza el Instituto Nacional de Estudios Estratégicos en Seguridad (INEES) de Guatemala.
El evento, que concluye hoy, reúne a expertos de distintas nacionalidades, quienes aportan visiones y recomendaciones en cuanto a prevenir el colapso de las telecomunicaciones, propiciados por terroristas capaces de penetrar y alterar sistemas sensibles, privados y estatales.
Estos problemas, en naciones como Guatemala, tienden a ser mayores, dada la poca capacidad de defensa que han desarrollado. Este panorama se complica, porque las amenazas crecen continuamente, en áreas y acciones inimaginables.
El punto es que el Gobierno hace bien en ocuparse del tema y definir mecanismos que nos permitan poner los pies sobre la tierra. Es esperanzador que el presidente Bernardo Arévalo tenga clara la situación y concluya que la IA torna vulnerable la democracia, así como la propia existencia humana.
En fin, está claro que no basta prevenir los ciberdelitos. Es imprescindible garantizar que las instituciones operen sin interferencias. Es prioritario que la tecnología siga siendo un aliado del desarrollo y no se torne en un nuevo peligro para la convivencia.