Sarasota (EE.UU.), EFE
El huracán Milton ha cobrado la vida de una docena de personas y dejado una senda de destrucción a su paso por Florida (EE.UU.), que generó tornados mortales y graves inundaciones.
El fenómeno de daños físicos estimados en 60 mil millones de dólares y 3 millones de usuarios sin el servicio de energía eléctrica.
Autoridades y afectados respiran con un poco de alivio porque “pudo haber sido peor”, según dijo Michael, un residente de Fort Myers que evacuó antes de la llegada del huracán.
El meteoro golpeó el centro de Florida con lluvia torrenciales y fuertes vientos, tras haber tocado tierra en la costa oeste del estado como huracán mayor con vientos de hasta 205 kilómetros por hora.
Tornados mortíferos, inundaciones, millones sin luz
Cinco de las 11 muertes se produjeron en el condado de St. Lucie, en la conocida como Costa del Tesoro (Treasure Coast), resultado de tornados relacionados con Milton que obligó a emitir 116 advertencias de seguridad, según dijo el gobernador del estado, Ron DeSantis.
Convertido ahora en un fenómeno extratropical, el poderoso ciclón salió de Florida tras atravesar el estado de oeste a este, aunque los expertos advierten que la costa este puede sufrir todavía intensas precipitaciones y marejadas ciclónicas.
El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo ayer que las medidas que se implementaron para salvar vidas marcaron la diferencia, pero advirtió que todavía es pronto para evaluar el daño total causado por el huracán.
Además Biden instó a su predecesor en el cargo y actual candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, a que abandone la desinformación sobre la respuesta del Gobierno a los huracanes Helene y Milton.
“Búscate una vida, hombre. Ayuda a esta gente”, afirmó Biden dirigiéndose directamente a Trump durante una comparecencia en la Casa Blanca.
El Servicio Meteorológico Nacional tuvo que declarar una emergencia por inundaciones repentinas en los condados de Pinellas y Hillsborough, en la costa oeste central de Florida, ante las intensas lluvias que se registraron, con lluvia acumulada de más de 43 centímetros y poderosos vientos que arrancaron árboles y tejados.
Las inundaciones obligaron a los equipos de socorro a rescatar en embarcaciones y vehículos especiales a cerca de medio millar de residentes.