La Paz, EFE
La defensa de Evo Morales sostuvo ayer que hay una “clara persecución política” contra el expresidente (2006-2019) por parte del Gobierno de Bolivia, encabezado por Luis Arce.
En declaraciones a EFE, el abogado Orlando Ceballos afirmó que “no ha habido denuncia escrita” ni oral, y acusó al Gobierno de ser “autocrático”, “policial” y de usar “a instancias judiciales y del Ministerio Público con el único propósito de la eliminación jurídica”.
“Esto es una clara persecución política, es la vendetta por la grandiosa ‘Marcha para salvar Bolivia’ y hoy el dirigente se encuentra, en cuanto a sus derechos y garantías, enormemente amenazado”, manifestó.
La marcha fue una caminata de 187 kilómetros liderada por Morales hacia La Paz para exigir al Gobierno atención a problemas como la escasez de dólares y combustibles, pero también para que se reconozca un congreso partidario en el que fue nombrado por sus seguidores como “candidato único” para las elecciones generales de 2025.
Ceballos consideró que el Ejecutivo “está haciendo un uso ruin de los mecanismos coercitivos y coactivos del Estado” e insistió en que el exgobernante “no tiene la más mínima garantía de que sus derechos” sean respetados por la Justicia o la Fiscalía.
Según el exmagistrado, hay “un viraje peligroso del Estado policial, del Gobierno policíaco que ha utilizado a una fiscal departamental” para activar el caso.