Foto: SBS
José Pablo, a sus 17 años, ha demostrado que con esfuerzo y apoyo se puede superar cualquier adversidad, incluso subir a escenarios internacionales. Tras su destacada participación en la Copa América de Barberos en Panamá, regresó a Guatemala con la firme convicción de que su talento no tiene límites.
En esta actividad, el joven compartió con los mejores peluqueros de América Latina, y enfrentó el reto con valentía y aprendió nuevas técnicas. Aunque su equipo quedó a solo seis puntos del primer lugar, José lleva ese logro con orgullo y una renovada visión del futuro.
Su historia se inicia cuando su madre lo abandonó a él y a cuatro hermanos más, por lo cual quedaron al cuidado del progenitor. Tras la muerte de su padre, un tío asumió la responsabilidad, pero con el tiempo dejó de ser considerado un recurso familiar idóneo, lo que llevó a que entraran al
sistema de protección.
Hoy, solo José Pablo y otro de sus hermanos siguen bajo la tutela del Estado, pero su historia es un ejemplo de superación. Este joven, quien ingresó en el sistema de protección a los 14 años, ha recorrido un camino lleno de desafíos.
Su reciente viaje a Panamá no solo refleja su talento, sino también la oportunidad que tuvo de ver más allá de lo que alguna vez imaginó. “Dejo de ver la barbería a nivel local. Ahora tengo aspiraciones más altas; me visualizo en el Mundial de Barbería”, comparte con determinación.
Ejemplo de equipo
Karen Quezada, jefa del Departamento de Vida Independiente de la Secretaría de Bienestar Social, destacó: “Tramitar su pasaporte y permitirle salir del país fue un esfuerzo colectivo. Su éxito es un reflejo del trabajo en equipo y del potencial que tienen nuestros adolescentes”.
Para el grupo, ver brillar en un escenario internacional a José es una gran recompensa. Además, pasó de ser estudiante a instructor, con lo cual gana un estipendio que le permite ahorrar de cara a su egreso del sistema de protección, en enero próximo, cuando cumpla la mayoría de edad, concluyó.