El bloque multipartidario anunciado recientemente en el Congreso de la República y que está integrado por 33 diputados distritales de seis bancadas legislativas refleja una clara evidencia de que en el seno de esas agrupaciones hay divisiones y roces políticos.
Los parlamentarios, que no se separarán de sus partidos pero que votarán de manera disciplinada en temas de interés común, son de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), Vamos, Visión con Valores (Viva), Nosotros, Cabal y Compromiso, Renovación y Orden (Creo), dio a conocer Inés Castillo, de la UNE.
El entrevistado aseguró que en dichos bloques congresiles “hay varias facciones y roces con los jefes de bancada” y por eso se generó este movimiento a lo interno del organismo de Estado.
“Nos agrupamos para generar incidencia, luchar por las causas más justas para toda Guatemala e influir en la agenda legislativa. Es un movimiento sin jefes”, remarcó.
Les interesa impulsar, entre otros, los proyectos de ley de Competencia, Protección al Consumidor y de Aguas, enfatizó
Castillo.
Lectura de expertos
“Esta nueva instancia multipartidaria es básicamente la confirmación y constatación del fraccionamiento que tienen varios partidos políticos, especialmente la UNE, Vamos y Viva”, comentó Renzo Rosal, analista político.
Para el politólogo, lo que “buscan, en principio, es posicionarse de cara a la elección de la próxima Junta Directiva del Congreso de la República, dado que “se vuelve un grupo importante para tomarlo en cuenta” en las negociaciones.
Cabildeo presupuestario
Fernando Bon, representante de Alianza por un Congreso Eficiente, se pronunció en términos similares.
La conformación de esta instancia política surge “más que todo en vistas a la elección de magistrados de las Cortes y recordemos que también viene la votación para designar la Junta Directiva de ese organismo, y la aprobación del Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado para el próximo año”, argumentó Bon.