El Cairo, EFE
El Gobierno de Egipto urgió ayer a todas las partes a mantener “la estabilidad en Líbano” ante la oleada de ataques cruzados entre Israel y Hizbulá.
Además denunció la “escalada irresponsable” de violencia que está amenazando la “paz y la seguridad internacional” en Oriente Medio.
En un comunicado, el Ministerio de Exteriores egipcio señaló que sigue con “extrema preocupación” los acontecimientos en el frente libanés e insistió en que es urgente “un alto el fuego global.”
El país árabe pidió que se respete la soberanía de Líbano y evitar el peligro de que “la zona se deslice hacia un estado de inestabilidad global”.
Pidió, por otra parte, que los esfuerzos internacionales se unan para “reducir la tensión” y trabajar “por ratificar la distensión y contener la escalada”.
De momento, la acción militar en la frontera de Israel y Líbano es la más grave desde el conflicto de 2006 y se ha cobrado la vida de más de 630 personas, la mayoría de lado libanés y en las filas de Hizbulá, que han confirmado unas 400 bajas. Los ataques del Ejército israelí han matado a 125 civiles libaneses.