En función de crear acciones y estrategias para atender a grupos más vulnerables que podrían sufrir gesta insuficiente de comida en el futuro, ayer, la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan) presentó el análisis de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en
Fases (CIF).
Según el estudio, alrededor de 9.6 millones de habitantes se proyectan con mayor seguridad alimentaria, entre septiembre 2024 y febrero 2025, en tanto que 2.7 millones podrían estar en una posición contraria, para lo cual emitieron recomendaciones, a fin de evitar el problema.
“Vamos a iniciar un proceso de trabajo para posicionar la seguridad alimentaria en la agenda”. Mireya Palmieri Titular de la Sesan
Mireya Palmieri, titular de la Sesan, detalló que se presentará el informe al Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Conasan), para orientar la toma de decisiones y enfatizar en las prioridades territoriales.
Palmieri resaltó que se debe ampliar la cobertura de intervenciones efectivas en las poblaciones con más necesidades, para lo cual recomienda al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) identificar a las familias que perdieron cultivos debido a sequías o inundaciones, lo que facilitará la asistencia, así como al Ministerio de Desarrollo Social (Mides) incrementar el apoyo con los programas de protección social para combatir el flagelo.
Rafael Zavala, de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), indicó que el CIF es una oportunidad para responder desde los gobiernos locales, en coordinación con las comunidades, a fin de atender a los pobladores de sitios más alejados con estrategias que disminuyan la vulnerabilidad.
CIF
Es una clasificación mundial para catalogar la gravedad y la magnitud de la inseguridad alimentaria. Entre sus fuentes de información está la Evaluación de Seguridad Alimentaria (ESA), del Programa Mundial de Alimentos (PMA), y el Sistema de Información sobre Datos en Situaciones de Emergencia (DIEM).