Son 34 contratos que datan de diciembre de 2021, algunos ya vencieron y unos más se prolongan hasta los primeros meses de 2025, según los datos públicos del Organismo Legislativo
El Legislativo ha asumido en los últimos años compromisos por 27.5 millones de quetzales para la renta de oficinas para uso de los 160 diputados, 16 bloques legislativos y personal administrativo, de acuerdo con información a junio del año en curso de ese órgano del Estado.
Lo anterior “en virtud de que los espacios físicos propiedad del Congreso de la República no son suficientes para las tareas parlamentarias”, se argumenta en el reporte de los 34 contratos firmados con 24 edificios, todos en los alrededores del Palacio Legislativo.
Del total de convenios, uno es de diciembre de 2021 y finaliza en noviembre de 2024; otro es de febrero de 2022 y concluyó en el segundo mes del año en curso.
Mientras, 15 pactos fueron rubricados entre abril y octubre de 2023 y vencen entre agosto y diciembre de 2024. En tanto que 17 fueron signados durante el presente año y finalizan, algunos, en diciembre, y otros entre enero y mayo de 2025.
Moneda y calidad
Del total de convenios legales, en 11 el valor se establece en moneda estadounidense y suman 2.5 millones de dólares (unos 19.1 millones de quetzales).
En otros 23, el pago es en moneda nacional y suman 8.4 millones, según se infiere del listado de contratos hechos públicos por el Legislativo.
No todos los espacios de trabajo rentados ofrecen las mismas comodidades a los legisladores. Algunas edificaciones son antiguas, mientras que los servicios con que cuentan y los salones para reuniones de trabajo son pequeños.
“En el edificio que yo estoy no se puede instalar aire acondicionado porque los flipones eléctricos son tan viejos que no dan para eso”, cuenta Andrea Reyes, diputada electa por el Movimiento Semilla. Agregó que hay legisladores “que tienen mejores espacios y existen oficinas que son bastante codiciadas como, por ejemplo, las del Edificio 7-10”.
Edificio propio
La necesidad de construir un edificio que albergue las oficinas de todos los legisladores es un tema que se ha hablado por mucho tiempo; sin embargo, a la fecha no se ha concretado nada.
“Es complicado conseguir un terreno cerca”, aseguró Reyes. Aunque consideró que la actual legislatura podría dar los primeros pasos para que ese sueño se haga realidad. Algunos inmuebles en donde se encuentran las oficinas alquiladas han evidenciado que no son los suficientemente seguros. Así quedó demostrado el pasado 17 de julio, cuando una persona con el rostro cubierto entró en la oficina de la diputada oficialista Elena Motta y se llevó equipos de computación y objetos personales.
Fernando Bon, director de Alianza por un Congreso Eficiente, indicó que siempre va a ser necesario que el Parlamento cuente con espacios adecuados para operar.
El experto indicó que el presupuesto de asignaciones globales actual de ese Organismo del Estado es de 81.7 millones de quetzales; es decir, arriba de 480 por ciento más en comparación con el de 2023 (14 millones de quetzales).
Ello se debe en buena medida, explicó, a que “se dejó una partida presupuestaria de 64.7 millones de quetzales para la compra y construcción del Parlamento Legislativo. Habrá que ver si se dejó un proyecto en marcha o solo asignados los recursos”.
A mediados de año, Nery Rodas, tercer vicepresidente del Congreso de la República, señaló que se han tenido reuniones con inversionistas, por lo que no hay que descartar la construcción de un edificio para el Legislativo.
Asimismo, explicó que se ha visto un lugar para su ubicación, que sería en los terrenos de Ferrocarriles de Guatemala (Fegua), que está destinado para un Centro de Gobierno, donde habría varios inmuebles.