El más reciente sondeo que hizo el Banco de Guatemala (Banguat) entre un panel de especialistas privados arrojó nuevamente resultados positivos sobre el desempeño de la actividad productiva del país. La muestra se realizó en la primera y cuarta semanas de julio recién pasado.
El índice de confianza de la actividad económica mostró algunos datos con ligeras bajas, pero, en términos generales, el optimismo sigue latente. El nivel de este numerador se situó en 64.56 por ciento, superior en 40.71 puntos porcentuales al resultado obtenido en el mismo mes de 2023, aunque con relación a junio sí fue menor. En ese mes el punteo fue de 70.74 por ciento.
“Hay miedo a una recesión, pero la economía es sólida”. Alvaro González Ricci, presidente de la Junta Monetaria.
Esta medición la realizan las autoridades monetarias con el propósito de establecer las percepciones sobre la situación económica actual y el ambiente para hacer negocios que tienen los analistas entrevistados, haciendo equivalencias con un año anterior y posterior. El Banguat hace diversas
interrogantes.
En julio no hubo mayores sorpresas en cuanto a lo que se palpa en torno al costo de vida, pues los profesionales manifestaron que al cierre del año aumentará un 4.03 por ciento, y en 2025, 4.05 por ciento, rangos que coinciden con las previsiones de la Junta Monetaria. Tampoco prevén que haya grandes crecimientos de las actividades productivas y coinciden en que el producto interno bruto mantendría un aumento de 3.2 por ciento al cierre del año.
A la pregunta: ¿considera usted que actualmente la economía del país está mejor que hace un año?, el 70.6 por ciento dijo que sí y un 29.4 por ciento respondió que no. En junio las respuestas fueron de un 76.6 y 23.5 por ciento, respectivamente.
Economía fuerte
El presidente del Banguat, Alvaro González Ricci, manifestó que luego de las volatilidades registradas en los mercados bursátiles mundiales el pasado lunes 5 del presente mes, debido a indicadores negativos en Estados Unidos, no habría de qué preocuparse. “Hay miedo a una recesión, pero la economía estadounidense aún se encuentra sólida”, expresó el funcionario.
De llegar a producirse, González Ricci reconoció que habría un impacto negativo en la economía de Guatemala. Bajarían las exportaciones y disminuiría sustancialmente el flujo de remesas familiares. También habría un impacto en la inversión extranjera directa, añadió. En similares términos se expresó José Raúl González Merlo, analista y alto ejecutivo de una compañía nacional.
“Vamos a crecer menos… estamos muy amarrados a Estados Unidos”, dijo.
Por ahora, según las autoridadades, no habría motivos sólidos para pensar en una recesión
en EE. UU.