La ONG Amnistía Internacional (AI) declaró preso de conciencia al periodista guatemalteco José Rubén Zamora Marroquín, encarcelado en su país desde hace dos años, y exigió su liberación inmediata e incondicional.
En un comunicado, la organización defensora de los derechos humanos constata que el periodista, reconocido con varios premios internacionales, está sometido a “procesos penales infundados en su contra” que “se enmarcan en el contexto de persecución penal por motivos políticos”.
Zamora Marroquín fue detenido durante cinco días después de lanzar fuertes críticas por corrupción en contra del presidente guatemalteco de aquel momento Alejandro Giammattei (2020-2024) y del exfuncionario de ese Gobierno Miguel Martínez.
El periodista, de 66 años, fue acusado entonces de lavado de dinero en un caso y en al menos otros dos por obstrucción a la Justicia, y aún no ha recibido sentencia en ninguno de los casos.
“José Rubén Zamora está perseguido por el ejercicio de su derecho a la libertad de expresión en el marco de sus labores periodísticas de investigación y denuncia de la corrupción”, señala AI.
“Es una víctima más de la estrategia de persecución por motivos políticos llevada a cabo por el Ministerio Público y el Organismo Judicial. No debe pasar ni un día más en la cárcel, su sufrimiento debe detenerse inmediatamente”, declaró Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
En marzo de 2024, el Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria declaró la detención de José Rubén Zamora arbitraria y exigió su liberación.
En julio, sus abogados enviaron una comunicación urgente a la Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre la Tortura, alertando sobre las condiciones de detención del periodista e incluso de hechos que podrían constituir actos de tortura, tratos crueles e inhumanos.
AI ha documentado numerosas violaciones de los derechos humanos de José Rubén Zamora, incluido el derecho a la libertad personal en razón de su detención arbitraria y el derecho a un juicio justo.
El actual presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, se refirió el pasado miércoles al periodista y dijo que el Ministerio Público (Fiscalía) “insiste” en criminalizarlo.
De acuerdo con el mandatario guatemalteco, el encarcelamiento de Zamora Marroquín “es el claro ejemplo de la corrupción y el abuso de poder que impera en el Ministerio Público”.
El presidente responsabilizó directamente a la Fiscalía de “insistir” en criminalizar a Zamora Marroquín y sostener casos penales en su contra que están plagados de “inconsistencias”.