Con la finalidad de dotar de equipo especial a las fuerzas de la Policía Nacional Civil (PNC) y dignificar su labor, la Dirección General de la entidad busca la adquisición de 10 mil chalecos antibalas. Para ello, la institución se respalda mediante la licitación pública EL-SCPNC-31-2024, la cual fue publicada en el Diario de Centro América el pasado jueves. La fecha para la presentación y recepción de ofertas es el 2 de septiembre próximo, a las 14 horas.
Según datos registrados en el Sistema de Información de Contrataciones y Adquisiciones del Estado Guatecompras, se solicitan 5 mil chalecos talla S, 4 mil en M y 1 mil L, que deben cumplir con especificaciones técnicas y certificaciones de seguridad de alto nivel.
Byron Ochoa, subdirector general de Apoyo y Logística de la PNC, explicó que para este año se espera comprar 20 mil prendas de estas. El entrevistado recordó que en 2023 también se adquirió una cantidad igual, por un costo de 95 millones de quetzales.
Ochoa informó que, además de los chalecos, para este período fiscal se proyecta la compra de más uniformes, botas, armas, municiones, colchonetas y casilleros. De estos últimos ya se adquirieron 12 mil, por 7 millones 200 mil quetzales, que iniciaron a repartirse en las comisarías.
Además, el funcionario detalló que, como parte de la dignificación de los uniformados, se han remozado 71 sedes policiales y se tiene pendiente hacer mejoras en otras 112 que necesitan
atención.
Lizandro Acuña, experto en temas de seguridad del Instituto de Análisis e Investigación de los Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac), expresó que estas acciones son positivas, pues los agentes deben contar con las herramientas necesarias para desarrollar sus labores de resguardo en beneficio de la población.
Acuña destacó que la compra de este equipamiento y otros enseres motivan y dignifican la labor operativa de los agentes.
Estas adquisiciones, además, garantizan que las futuras promociones que se integren a las filas de la Policía tengan recursos y provisiones para salir de inmediato a las calles a servir a la comunidad, agregó el experto.
“En la medida que los servidores posean equipo de protección y las herramientas necesarias para desarrollar sus funciones podrán cumplir con el mandato constitucional de garantizar la tranquilidad de los habitantes”, resaltó el analista.
