Reconfortante. Así se percibe, para el fortalecimiento de nuestra débil democracia, la reafirmación de brindar total apertura a la Prensa, hecha por el nuevo secretario de Comunicación Social de la Presidencia. Con ello, Santiago Palomo sostiene la promesa que, desde el 14 de enero, hizoel gobierno del presidente Bernardo Arévalo y la vicegobernante Karin Herrera.
Es de suma relevancia para la gestión gubernamental mantener al pueblo informado de todo lo que se hace y no se puede hacer por diversas razones. Esa es la línea que debe seguir el nuevo encargado de esta dependencia; de él y su equipo de trabajo dependerá, en gran medida, la imagen que las diversas instituciones del Estado reflejen ante la opinión pública.
Su desempeño será vital porque desde ahí es posible articular el rol de puertas abiertas de todos los ministerios, secretarías y otras entidades públicas.
Es oportuno mencionar que no todos los funcionarios entienden el papel que desempeña la prensa nacional e internacional. Por costumbre quizá algunos no están familiarizados con el escrutinio público, pero deben entender que la libertad de expresión es uno de los postulados sagrados de nuestra Constitución Política de la República y, por consiguiente, son ellos quienes deben responder a ese mandato.
Pero tampoco se trata de ser condescendientes con los medios de comunicación. Sencillamente es una obligación que recae sobre los hombros de todos los que ocupan altos cargos, de atender los requerimientos que llegan de diversos canales informativos.
El nuevo secretario de Comunicación relevó a Haroldo Sánchez, a quien le tocó reorganizar el trabajo de una oficina pública que, más que informar sobre las actividades del binomio presidencial, se dedicó por años a cerrar espacios a periodistas y medios críticos.
De lo que por ahora nadie tiene duda es que desde la cúpula presidencial existe total voluntad política de mantener los canales informativos abiertos, no solo a la Prensa sino a toda la población. El Gobierno sabe que es mejor informar que callar y la apuestaserá continuar por ese camino, según afirma Palomo.