EFE
Desde la caída en popularidad de Joe Biden, debido al deterioro notable de su salud hasta los problemas legales y de carácter de Donald Trump, la apuesta por los votos en Estados Unidos es una moneda al aire que pelean tanto republicanos como
demócratas.
El enfrentamiento entre el presidente Joe Biden y el expresidente Donald Trump, la noche del 27 de junio, en Atlanta, dejó en los espectadores la imagen de un gobernante debilitado e incompetente y la de un aspirante agresivo y vigoroso.
Los ciudadanos, que esperaban asistir al glorioso espectáculo de dos políticos largamente ejercitados en el arte de gobernar exponiendo sus ideas con luminosa claridad y con argumentos lógicamente irreprochables, quedaron, como mínimo, desencantados.
“En el primer debate presidencial de 2024 en Atlanta, las actuaciones de los contrincantes no estuvieron a la altura de las expectativas”, dijo Todd Graham, un observador calificado, especializado en la política de
Estados Unidos.
Ahora todos se preguntan qué sucederá. ¿Será Biden reemplazado como candidato presidencial del Partido Demócrata?
Abigail Disney, heredera del emporio Disney, y el cofundador de Netflix, Reed Hastings, quienes durante años han financiado actividades demócratas con recursos millonarios, piden a Biden abandonar la candidatura.
El domingo 7 de julio, el diario The New York Times publicó que al menos 10 congresistas demócratas han hecho llamamientos para que dé un paso al costado. El novelista Stephen King formuló igual petición.
Un día después, Biden envió una carta a los senadores y legisladores, en la que insistió en que seguirá en la carrera presidencial contra Trump.
“Quiero que sepan que a pesar de todas las especulaciones en la prensa y en otros espacios, estoy firmemente comprometido a permanecer en esta contienda, a llegar hasta el final y a vencer a Donald Trump”, afirmó.
En el seno del partido, los simpatizantes lo llaman perseverante, pero sus adversarios lo consideran testarudo y piensan que debería ser reemplazado.
En cuanto al expresidente Trump, también se plantean interrogantes; específicamente, respecto a su situación jurídica. El 30 de mayo de este año, un jurado lo declaró culpable de 34 cargos. Además, hay otros juicios presentados en su contra.
¿Puede aspirar a un segundo mandato? ¿Puede, un ciudadano que ha sido vencido en juicio y declarado culpable ser candidato presidencial? Y, finalmente, ¿puede desempeñar la Presidencia de los Estados Unidos?
Aparentemente, la declaratoria de culpabilidad no comporta prohibición para
desempeñar cargos públicos de alta jerarquía. Además, a los simpatizantes de Trump no parece importarles mucho el hecho de que se trate de un ciudadano con pasado delictivo.
En primer lugar, ellos están convencidos (con razón o sin ella) de que la declaratoria de culpabilidad ha sido resultado de una conspiración contra el exgobernante y no significa que en realidad él sea un
delincuente.
Por otra parte, el exmandatario ha logrado acaparar simpatías por su firme propósito de enfrentar la inmigración. La máxima expresión de ese propósito fue el proyecto de levantar un muro gigantesco.
Teniendo presente el atractivo electoral de ese componente, el Comité Nacional Republicano aprobó un programa en el que se plantea “detener la invasión migrante” en Estados Unidos.
Lo más reciente
El actor y director George Clooney, un demócrata confeso que ha participado en diversas campañas presidenciales en EE. UU. y ha apoyado la reelección de Joe Biden, se unió el miércoles 10 a las voces de su partido que piden al mandatario que se retire de la contienda y dé paso a un nuevo candidato. Dijo que su opinión la comparten en privado numerosos congresistas y senadores.
El actor estadounidense, que lideró el mes pasado, junto a la actriz Julia Roberts, un evento de recaudación de fondos, dejó claro su apoyo a Biden como senador, vicepresidente y como presidente. “Lo considero un amigo y creo en él. Creo en su carácter. Creo en su moral. En los últimos cuatro años, ha ganado muchas de las batallas que ha enfrentado”, dijo la estrella de Hollywood en un artículo de opinión publicado en el New York Times.
Pero Clooney, uno de los últimos actores en sumarse a la misión por la reelección, también afirmó que “la única batalla que (Biden) no puede ganar es la lucha contra el tiempo. Ninguno de nosotros puede”, indicó para recordar que el Biden que busca ahora la reelección no es el mismo del 2010, cuando era vicepresidente.
“Es devastador decirlo, pero el Joe Biden con el que estuve hace tres semanas en la recaudación de fondos no era el Joe Biden (…) de 2010, ni siquiera era el Joe Biden de 2020. Era el mismo hombre que todos presenciamos en el debate”, indicó en el artículo de opinión.