Para el segundo semestre del año se tiene programado un elevado número de interpelaciones en el Parlamento, lo que perjudicaría el trabajo del Organismo Ejecutivo, es una de las conclusiones del informe de percepción del Organismo Legislativo, desarrollado por la Alianza por un Congreso Eficiente.
“Incluso a ministros que recientemente asumieron el cargo”, afirmó Fernando Bon, director ejecutivo de la citada Alianza, integrada por las agrupaciones Guatemala Visible, Fundación Proyecto de Vida y el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN).
“Preocupa porque hay intención de torpedear al Gobierno”.
Laura Marroquín Diputada electa por Semilla
Añadió: “Hay muchas citaciones a comisiones de trabajo, lo que puede llegar a entorpecer, en algún momento, la labor de estos funcionarios”.
De hecho, el análisis indica que las comisiones legislativas se han centrado en fiscalizar funcionarios más que en discutir iniciativas de ley.
Estrategia
María del Carmen Aceña, del CIEN, consideró que “se han agendado muchas interpelaciones en el segundo período” legislativo; en los últimos años, estas “han sido una forma de detener a los ministros, para negociar con el Ejecutivo”.
De acuerdo con el estudio, para julio están calendarizadas las intervenciones de los titulares de Gobernación y de Relaciones Exteriores, quienes fueron convocados por las bancadas Valor, Unionista, Azul, Vamos, Viva y Bien; y, por aparte, por la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE). Además, tendrá que llegar la titular del Ministerio de Salud.
También, está pendiente de agendarse la cita con el ministro de Comunicaciones, Félix Manuel Alvarado, requerida por la diputada independiente Vivian Preciado, así como asignar fecha para la ministra de Cultura, Liwy Grazioso Sierra.
Presión
“Hemos visto un aumento de la presión por parte de diputados que estarían haciendo oposición al Gobierno y que utilizan el instrumento de la interpelación como mecanismo de extorsión o amenaza para intentar conseguir algunos de los incentivos que se les daba en el pasado, relacionados con impunidad o corrupción”, enfatizó Samuel Pérez, congresista electo por el Movimiento Semilla.
Asimismo, Laura Marroquín, parlamentaria de la misma agrupación, subrayó que la situación “preocupa porque hay una intención de torpedear al Gobierno, debido a que no hay ciertos incentivos transaccionales como se tenían antes.
No se les ha permitido a los ministros entregar resultados”. Puso como ejemplo al extitular de la cartera de Salud, Oscar Cordón, quien tuvo más de 331 requerimientos, entre solicitudes de información, citaciones y visitas.