EE.UU, EFE
La decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos de conceder inmunidad parcial a Donald Trump por sus actos como presidente (2017-2021), durante el asalto al Capitolio le hace ganar un elemento crucial en su carrera hacia la Casa Blanca: tiempo.
El exmandatario ya había conseguido dilatar los procesos en su contra, pero el dictamen de la máxima instancia judicial da un nuevo impulso a sus aspiraciones políticas al dificultar que estos se resuelvan antes de los comicios del 5 de noviembre.
El poder presidencial, según el Supremo, “da derecho a un exdignatario a la inmunidad absoluta de enjuiciamiento penal por acciones dentro de su autoridad constitucional” y le concede derecho a la presunta inocencia judicial por esos actos oficiales, pero no para los no oficiales.
“El Tribunal no hace mucho para distinguir qué acciones encajan o no en cada categoría. Remite esto a órganos inferiores para que determinen de forma más precisa y clara qué actos fueron oficiales y cuáles no”, explica a EFE Mark Smith, decano de la Facultad de Humanidades en la Universidad Cedaverville.
En Washington D.C., Trump está acusado de subversión electoral, por los intentos por revertir los resultados de las elecciones de 2020, en las que ganó el demócrata Joe Biden, que derivaron en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.