Redacción: Luis Carrillo, Rodrigo Pérez y Gustavo Villagrán / Foto: Norvin Mendoza
La crisis que enfrenta el país en materia de infraestructura, exacerbada por el abandono histórico y las recientes lluvias que han deteriorado las carreteras, fue resaltada por el presidente Bernardo Arévalo en su discurso durante un congreso de empresarios.
Además, expresó su preocupación sobre los peligros que acechan al Puerto Quetzal y al Aeropuerto Internacional La Aurora (AILA), fundamentales para el desarrollo nacional.
Arévalo subrayó que el deplorable estado de las vías terrestres no debería sorprender, considerando el prolongado abandono y las décadas de negligencia, incompetencia y corrupción que han
caracterizado su manejo.
También, enfatizó que estos actos han convertido la infraestructura crítica, como las instalaciones portuarias del Pacífico y el Aeropuerto La Aurora, en un campo de batalla para actores políticos y económicos que buscan enriquecerse a costa del bienestar de los guatemaltecos.
“Carreteras, puertos y aeropuertos están encadenados por la codicia y la desvergüenza de unos cuantos. La terminal aérea, que debería ser la puerta a través de la cual Guatemala proyecta al mundo su ingenio, esfuerzo y potencial, es un obstáculo para el desarrollo”, comentó.
Asimismo, el gobernante destacó la importancia de los aeropuertos internacionales en el comercio, la atracción de inversiones, el turismo y la conectividad mundial, subrayando que una terminal aérea disfuncional y negligente perjudica la imagen del país.
“Es la impresión que reciben los visitantes y los inversionistas que llegan para explorar oportunidades de negocios o en busca de un lugar para establecer sus empresas. Si se pierden estas ocasiones, nos quedamos sin posibilidades de nuevos empleos y contribuciones al desarrollo”, señaló.
El mandatario hizo un llamado a recuperar esta infraestructura lo antes posible y convertir la terminal aérea en la más importante de Centroamérica, como debería ser. “Desde el Gobierno, en especial las nuevas autoridades del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda y de la Dirección General de Aeronáutica Civil, hemos asumido este desafío”, afirmó.
Finalmente, Arévalo agradeció el apoyo del sector privado, consciente de las oportunidades que el país pierde con la actual situación y de los beneficios que un aeropuerto moderno traería. “Estamos animados a respaldar los diagnósticos técnicos y las acciones que propongan los especialistas y que definan las autoridades competentes para seguir la hoja de ruta que marcará el camino para la óptima y segura operación de la infraestructura aeroportuaria de Guatemala”, concluyó.
Anuncia alianza público-privada
El presidente Bernardo Arévalo anunció que desde el gobierno se analiza una licitación para una alianza público-privada que modernizará y administrará el Aeropuerto Internacional La Aurora (AILA). La noticia fue bien recibida por distintos sectores del país.
Rolando Schweikert, presidente de la Cámara de Turismo de Guatemala, resaltó el impacto positivo que daría al país de concretarse la acción. +
Por su parte, Motty Rodas, directora ejecutiva de la Asociación Guatemalteca de Líneas Aéreas, expresó su esperanza de contar con un aeropuerto de nivel internacional.
Juan Carlos Zapata, director ejecutivo de Fundesa, calificó el anuncio como un “un buen mensaje”, crucial para mejorar la conectividad y la infraestructura, mientras, Raúl Bouscayrol, presidente de la Cámara de Industria de Guatemala, destacó la necesidad de actualizar el modelo de obra pública para impulsar el desarrollo económico del país.
Supervisan trabajos
Verificar cómo marchan las tareas para restaurar el paso vehicular en el kilómetro 44 de la autopista Palín-Escuintla, una de las rutas comerciales y turísticas más importantes del país, fue el objetivo de la visita que realizó ayer a ese lugar el presidente Arévalo, en compañía del ministro de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (Micivi), Félix Alvarado, y de la secretaria de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Claudinne Ogaldes.
“Se estima que en tres semanas vamos a tener un tránsito parcial en la carretera y en unas seis semanas estará totalmente restablecido”, dijo el mandatario.
De momento, se excava para llegar al tubo que atraviesa el tramo y que falló, para luego corregir el problema. Se explicó que, en la misma ruta, en los kilómetros 39 y 45, antes y después de donde se
registró el hundimiento, se están haciendo trabajos preventivos.
Avances
El ministro Alvarado comentó que ya se ven avances en comparación con lo que observó el pasado domingo. Advirtió que la estimación para que la vía esté nuevamente en funcionamiento depende de las condiciones climáticas porque, debido a estas, se pueden interrumpir los trabajos.
Ogaldes dijo que el sistema de la Conred está preparado para atender las emergencias y a los damnificados por las lluvias. “Contamos con convoy del Cuerpo de Ingenieros del Ejército y de la Unidad de Conservación Vial; hemos identificado 1 mil 800 albergues”, agregó.
Enfatizó que, de momento, en todo el territorio nacional hay 1 mil 900 familias albergadas y con lo que cuentan hasta ahora pueden atender a 12 mil familias.
Precipitaciones continuarán esta semana
Las lluvias sobre el territorio nacional continuarán esta semana debido a un trastorno meteorológico sobre Campeche, México, y otro que está en formación.
Según el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), si aumenta la velocidad del viento, el fenómeno podría convertirse en depresión tropical y pronostica que se alejará de Guatemala, pero dejará una cola de fuerte ingreso de humedad que causará aguaceros intermitentes sobre el país, provocando inundaciones, crecidas de ríos y movimiento de tierra.
En la Conred se indicó que el temporal ha causado 452 incidentes, el fallecimiento de ocho personas, tres de ellas el pasado lunes, arrastradas por la corriente de un río en aldea Tempisque, Jutiapa. Se reportan cinco heridos, 1 mil 771 damnificados, 5 mil 344 evacuados, 1 mil 155 en riesgo, 1 millón 894 mil 546 afectados, 1 mil 985 viviendas con daños. Además, 25 escuelas, ocho edificios y cinco puentes dañados; de estos últimos tres fueron destruidos.
Seguridad, atención médica y refugio
Atención en seguridad y médica se brinda a 40 personas, la mitad de ellas niños, que perdieron sus hogares por las precipitaciones y están resguardadas en el Centro de Atención y Desarrollo Infantil (CADI) que funciona como albergue en Palín, Escuintla.
La Policía Nacional Civil (PNC) protege el sitio. “Están alojados desde el 11 de junio, cuando arreciaron las lluvias, y son de varias comunidades como La Periquera, La Fe, Buganvilias y Ebenezer; algunos son indigentes. Se les dan los tres tiempos de comida”, indicó Concepción Ché, a cargo del refugio.
“Se derrumbó la casa, había agua, piedras y palos por todos lados. Gracias a la misericordia de Dios, salimos con vida porque todo se destruyó”, dijo Jaqueline Pérez, de 36 años, madre de seis niños. La entrevistada también ha recibido el apoyo de la Secretaría de Obras Sociales de la Esposa del Presidente (Sosep), Ministerio de Desarrollo Social (Mides) y comuna de Palín.
