En el reajuste presupuestario solicitado por el Gobierno al Congreso de la República se contemplan recursos extraordinarios por 419.9 millones de quetzales para la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac), dado que la Carta Magna ordena asignarle el cinco por ciento de los ingresos ordinarios de la nación.
De aprobarse la petición, esos fondos deberían invertirse en mejorar las condiciones en las que los estudiantes de la Usac, en especial en el interior del país, se forman en diversas áreas del conocimiento, consideran expertos.
“Todos reconocen que hay deficiencias en materia de instalaciones y equipamiento, condiciones básicas y mínimas para el buen funcionamiento de la academia en el proceso de enseñanza”, afirmó
el analista Luis Linares.
También, debería mejorarse la investigación “sobre los problemas nacionales, áreas científicas y tecnológicas porque tiene que crear conocimiento y no solo difundirlo”, agregó.
Priorizar departamentos
Lenina García, exsecretaria de la Asociación de Estudiantes Universitarios (AEU), coincidió con los aportes referidos.
En ese sentido, afirmó que la situación es peor en los centros de enseñanza superior de los
departamentos.
“Históricamente, una de las grandes debilidades es que no hay igualdad de condiciones para los estudiantes del campus central y los que están en las extensiones departamentales y escuelas no facultativas”, aseguró la lideresa estudiantil.
De esa cuenta, indicó que “es necesaria una priorización de que las condiciones de enseñanza de estos alumnos sean dignas en infraestructura, aulas, mobiliario y equipo”.
Los entrevistados coincidieron en que la citada coyuntura tiene como telón de fondo los inconvenientes de legitimidad que enfrenta el rector Walter Mazariegos y el Consejo Superior Universitario. Desde hace más de dos años, la Usac atraviesa una crisis administrativa, estudiantil y judicial por el citado nombramiento.