Ante la situación de peligro en la que se desarrollan menos de 60 especímenes de manatíes en Izabal, la Fundación para el Desarrollo de las Zonas Secas y Semiáridas de Mesoamérica (Fundesem) hizo un llamado de emergencia para proteger a esta especie en Guatemala.
Jenifer Calderón, directora ejecutiva de la organización, informó que estiman que la población actual no llega a 60, luego de que el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) publicó en 2006 que existían 150, pero a partir de esa fecha han disminuido sustancialmente los registros de avistamientos realizados en los monitoreos del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap).
Por ello, lanzaron el evento Salvemos a los manatíes, la invitación a los asistentes del sector privado y de cooperación internacional, a sumarse a los esfuerzos y colaborar juntos para encontrar soluciones y proteger, conservar y recuperar los ecosistemas estratégicos.
Fabiola Corona, bióloga experta, dio a conocer que las principales causas del descenso son los cambios de temperatura, la contaminación y el daño al ecosistema, así como el impacto de la actividad humana en la región.
Asimismo, Raquel Sigüenza, representante de Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), refirió que este animal está catalogado a escala mundial como vulnerable en la Lista Roja de Especies Amenazadas.
Mientras que Tania Sandoval, del Conap, reforzó el dato al mencionar que el manatí se encuentra en categoría 1 de la referida nómina, lo cual es un indicador de que está en peligro crítico en el territorio nacional.