Los hechos de violencia ocurridos en los últimos días buscan crear una sensación de que se está de rodillas ante la delincuencia y desestabilizar a las autoridades de turno, consideran expertos.
Entre los casos están el homicidio del influencer y cantante, Jorge Sebastián Pop Chocoj, Farruko Pop, y el ataque armado dentro de una funeraria, en la zona 6, donde fallecieron dos personas.
“Lo que quieren es generar una sensación de inoperancia en el Gobierno, y este, ahora, debe dar muestras de que está trabajando de manera efectiva”, afirmó Mario Polanco, del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), entidad experta en monitoreo y análisis de seguridad.
Polanco afirmó que los grupos del crimen organizado, en el que se incluye a las maras, luego de algunos meses han logrado comprender cómo están funcionando las políticas de resguardo de la
población.
“Por eso comienzan a actuar de esta manera”, remarcó. El activista recomendó a las autoridades poner en marcha planes novedosos y diferentes, que no se prolonguen en el tiempo, para evitar
esta situación.
Al referirse al asesinato de Pop Chocoj, el exfiscal Francisco Solórzano Foppa dijo que se busca “crear una ola de violencia y percepción de inseguridad con el fin de desestabilizar al Gobierno”.
Asimismo, Solórzano Foppa comentó que hay una readecuación en los mandos de las pandillas, lo cual también ha desencadenado una serie de crímenes entre ellos.
Detienen a sindicado
Un sospechoso por la muerte de Farruko Pop, identificado como Carlos Roberto López, de 20 años, fue capturado ayer en horas de la tarde en la colonia El Limón, zona 18, y puesto a disposición de los tribunales correspondiente para que aclare su situación legal, informó la Policía Nacional Civil (PNC). En el operativo participó la Fiscalía contra Secuestros del Ministerio Público.
En el lugar también se localizó a una adolescente, con alerta Alba-Keneth, quien fue conducida al juzgado correspondiente.
Aíslan a líderes de Mara 18
Cuatro líderes de la Mara 18 fueron aislados ayer, durante una mega requisa realizada en el Centro de Detención de Alta Seguridad Fraijanes II, en seguimiento a la desaparición y crimen contra Jorge Sebastián Pop, Farruko Pop. Los pandilleros separados son Saúl Eduardo Izep Vásquez, el Vago; Luis Yeferson Rosales Flores, Mosca; Eduardo Salvador González Velásquez, el Lunático, y Aldo Ochoa Mejía Dupié, Lobo, informó la Policía Nacional Civil (PNC).
“Estos peligrosos mareros estarán sin recibir visitas ni encomiendas”, afirmó David Custodio Boteo, director de la PNC, quien encabezó el operativo. Al cierre de esta edición, estos eran los resultados preliminares de la requisa, que incluyó la cárcel de Pavón.
“Buenas tardes, llegó esta visita: más de 600 agentes de PNC, 233 de la División Especializada en Investigación Criminal y 100 agentes de élite el SP”, enumeró el ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, al anunciar la diligencia.
En la inspección sorpresa también participaron seis agentes caninos, cuatro drones, tres lectores de huellas MI3 y una ambulancia. Las acciones buscan, además, retomar el control de esos centros de privación de libertad.