A lo largo de la tradición filosófica occidental y de la economía política, han existido innumerables visiones contrastantes sobre el concepto de propiedad. Por ejemplo, pensadores que no veían con buenos ojos a la sociedad comercial como Karl Marx (1818-1883) y Jean-Jacques Rousseau (1712-1778) veían un sinfín de males y de elementos negativos respecto a la propiedad, a tal punto que Rousseau llegó a señalar que la propiedad privada era fuente de conflicto y había incluso envilecido al hombre (originalmente un buen salvaje) al introducirlo a los vicios de la sociedad comercial. Dichos que enfurecieron al gran filósofo francés Voltaire. En palabras de Rousseau:
“El primero al que, tras haber cercado un terreno, se le ocurrió decir esto es mío y encontró personas lo bastante simples para creerle fue el verdadero fundador de la sociedad civil. Cuántos crímenes, guerras, asesinatos, miserias y horrores no habría ahorrado al género humano quien, arrancando las estacas o rellenando la zanja, hubiera gritado a sus semejantes: ‘¡Guardaos de escuchar a este impostor!; estáis perdidos si olvidáis que los frutos son de todos y que la tierra no es de nadie’” (Rousseau, 2012, p. 161).
Siguiendo los pasos de Rousseau, Karl Marx dijo cosas parecidas e incluso mucho más extremas en el Manifiesto Comunista y en otros escritos. Posteriormente, mucha gente se compró aquel discurso demonizando a la propiedad privada, y bueno, la historia del siglo XX y de los totalitarismos ya todos la conocemos. Dejando de lado dichas posturas y desde el otro lado de la vereda política, existe otro conjunto de pensadores que vieron con ojos positivos a los derechos de propiedad y al nacimiento de la sociedad comercial.
A este grupo pertenecen pensadores como Adam Smith, Voltaire, David Hume e Immanuel Kant. En específico, en este texto nos centraremos en las diferentes perspectivas sobre la naturaleza y la legitimidad de la propiedad que se encuentran en las obras de dos influyentes filósofos de la Ilustración, David Hume (1711-1776), pensador clave de la ilustración escocesa y mejor amigo de Adam Smith, y John Locke (1632-1704), pensador inglés que ha influenciado profundamente el pensamiento libertario
contemporáneo.
Continuará…