Con el propósito de consolidar la cultura de transparencia y rendición de cuentas en sus procesos administrativos, financieros y operativos, el Ejército de Guatemala presentó ayer su Política de Transparencia.
Esta medida busca garantizar que el gasto público responda efectivamente a las necesidades y demandas de la población mediante la implementación de acciones preventivas contra la corrupción, acceso a la información pública, promoción de buenas prácticas y fortalecimiento de los controles
internos.
Henry David Saenz, ministro de la Defensa Nacional, destacó que esta iniciativa “permitirá potenciar los procesos institucionales para la prevención, detección, sanción y erradicación de cualquier acto o indicio de corruptela, tanto en las áreas administrativas como operativas”.
El proyecto contó con el respaldo de entidades como la Contraloría General de Cuentas (CGC), la Comisión Presidencial de Gobierno Abierto y Electrónico (GAE), la Secretaría General de Planificación y Programación (Segeplan) y la Comisión Nacional contra la Corrupción (CNC).
Santiago Palomo, titular de la CNC, resaltó la importancia de estas acciones, pues marcan “un precedente de cooperación, apertura y trabajo interinstitucional necesario para cumplir con las demandas de la población en materia de transparencia y rendición de cuentas”.
Este documento refuerza una de las principales políticas del gobierno del presidente
Bernardo Arévalo y la vicemandataria Karin Herrera para combatir estratégica y frontalmente la corrupción, y posiciona al Ejército como un organismo comprometido en esta lucha.
Estas acciones no son nuevas, según el coronel Francisco Girón, analista en temas de seguridad e Inteligencia, quien menciona que desde 2012 se implementaron acciones como la Gestión por Resultados en el Ejército.
Sin embargo, reconoció que esta Política demuestra el compromiso de la institución con la transparencia y el buen manejo de los recursos.
