Washington, EFE
La Organización de los Estados Americanos (OEA) convocó a una reunión de emergencia para tratar el asalto de las fuerzas ecuatorianas a la Embajada mexicana en Quito, como consecuencia de la inquietud internacional generada por la acción policial.
Después de hacer un llamado al diálogo entre las partes para resolver sus diferencias, la Secretaría General de la OEA estimó necesario un encuentro del Consejo Permanente, y subrayó que el problema debe ser tratado “con base en los principios consagrados en el derecho internacional, como el respeto a la soberanía, la solución pacífica de las controversias, la coexistencia pacífica de los Estados, la renuncia a recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza para dirimir los conflictos y el fiel y estricto cumplimiento de los tratados internacionales; entre ellos, los que garantizan el Derecho de Asilo”.
5 de abril se dio el asalto a la sede diplomática.
Por otra parte, el expresidente de Ecuador Rafael Correa (2007 a 2017) instó a la Unión Europea y al resto de la comunidad internacional a hacer “presiones políticas” para que el gobierno ecuatoriano de Daniel Noboa conceda un salvoconducto al exvicepresidente Jorge Glas.
En tanto, Glas permanece hospitalizado tras un presunto intento de suicidio por sobredosis de medicamentos, el cual, las autoridades penitenciarias achacan a su negativa de comer desde que fue nuevamente encarcelado luego de su detención en la Embajada.
México mantiene su postura de rechazo frontal a lo sucedido en su sede diplomática, aunque ha optado por la prudencia y dirimir la crisis con denuncias ante las instancias internacionales.