Para evitar dudas sobre el compromiso de su administración y reafirmar la cero tolerancia contra el mal uso de recursos del Estado, el presidente, Bernardo Arévalo, destituyó a María José Iturbide del cargo de ministra de Ambiente y Recursos Naturales, se informó mediante una comunicación oficial compartida desde la Secretaría General de la Presidencia.
La decisión fue tomada luego de que se hizo de conocimiento público que un vehículo oficial asignado a Iturbide era utilizado por su hija. La exfuncionaria argumentó que la disposición había sido tomada por cuestiones de seguridad, posteriormente, ofreció disculpas por dicha acción.
El comunicado detalló que el mandatario también instruyó a la Comisión Nacional contra la Corrupción a crear directrices para el buen uso de vehículos estatales, con el fin de garantizar su empleo responsable, en línea con los principios que estarán contenidos en el Código de Ética para funcionarios del Organismo Ejecutivo.
La vicemandataria de la República, Karin Herrera, escribió que la acción cometida por la exministra le pareció inadmisible. “Abordaremos las razones de la destitución en el Gabinete, para que los abusos de los recursos del Estado no vuelvan a ocurrir en nuestro gobierno”, escribió en X. Para Manfredo Marroquín, de Acción Ciudadana, la resolución del Presidente es correcta, pues la ciudadanía demanda transparencia y el cese de excesos, que era generalizado en administraciones anteriores. “Fue una decisión acertada que le da credibilidad al discurso de lucha contra la corrupción con el que inició esta gestión, que estaba perdiendo fuerza”, concluyó Marroquín.
